Venaseal: El pegamento para las varices
Hace años que llevamos suspirando en la búsqueda de sistemas milagrosos para tratar los problemas más comunes de belleza y …¡tachan! ¿Pegar las orejas a la cabeza sin pasar por quirófano? – Concedido – ¿Sacar lo que sobra de la barriga y ponerlo en el pecho? – Concedido - ¿Deshacer la grasa de la papada con una inyección? – Concedido-
Y no de estos creadores, sino de la mano de Medtronic, llega a Aurea Clinic el pegamento para cerrar las varices: en 10 minutos y sin prendas de presoterapia ni medias.
¿Tienes varices?
El término "varices" está muy extendido, y todo el mundo pone en su mente, más o menos, lo que es una variz. Pero todas las varices no son iguales. Ninguna variz es bonita, pero algunas, además, son peligrosas, otras solo antiestéticas. Suelen aparecer en las piernas, y las sufren tanto hombres, como mujeres.
Las varices, en definición, son una dilatación permanente de una vena, causada por una acumulación de sangre. Lo que viene siendo un problema de circulación, que deja marcas visibles en una de las áreas del cuerpo que más enseñamos, y que, además, provocan sensación de pesadez, dolores, calambres, etc.
¿Por qué a mi?
Los signos de una mala circulación, como lo son las arañas vasculares y las varices, aparecen en el cuerpo tras años de malos hábitos y también por causas genéticas. El sobrepeso, el sedentarismo, permanecer mucho tiempo de pie o con un calzado inadecuado y la toma prolongada de ciertos anticonceptivos pueden provocar daños en el sistema venoso. Las lesiones en el sistema venoso pueden darse en el plano más superficial o en el profundo. Esta situación, determinará la manera más adecuada de solucionar el problema.
Sin embargo, si se toman ciertas medidas como utilizar medias de compresión o beber la cantidad adecuada de agua todos los días puede evitar que se intensifiquen los síntomas y signos visibles.
¿Cuál es el mejor tratamiento?
El tratamiento de la enfermedad varicosa va a depender del tipo de varices del paciente y de la localización de la enfermedad: que sea en las venas superficiales, en las venas profundas o en las perforantes. Cuando las varices son dolorosas, puede ser signo de insuficiencia venosa crónica, lo cual no tiene tratamiento estético, sino médico. La única forma de discernir en qué grado se encuentran los daños es mediante una prueba de diagnóstico por imagen, interpretada por un especialista: una eco-doppler. Es muy común que los pacientes se sometan al tratamiento prescrito sin antes comprobar que todo está bien, viéndolo "desde dentro". Realizarse un tratamiento inadecuado provoca frustración por no conseguir los resultados esperados, y una pérdida de tiempo que puede ser crucial para el paciente. Así que, tras la eco-doppler, determinaremos cuál es nuestro problema para elegir la forma más adecuada de afrontarlo:
- Grados I y II: Venas reticulares y telangiectasias, las conocidas como arañas vasculares. Son de color azulado y no suele sobresalir de la piel. El tratamiento de elección es la esclerosis de las mismas. La esclerosis consiste en inyectar una solución dentro de las mismas para sellarlas, evitando que la sangre circule nuevamente por ellas agolpándose. Es preferible realizarse las sesiones de esclerosis en épocas fuera del verano. Serán necesarias varias sesiones y vestir medias de compresión durante al menos 8 horas diarias. La esclerosis no es una solución definitiva, ya que al sellar estas arañas, pueden aparecer otras con el paso del tiempo. Sin embargo, es la respuesta más eficaz ante este problema.
- Grado III: Venas varicosas en las que no encontramos insuficiencia del cayado de la safena interna, externa ni perforantes. Son las que se llaman más comúnmente varices. Esas más verdosas, que pueden sobresalir un poco, más grandes que las arañas vasculares. En estos casos se utilizan microespumas, igualmente inyectadas, para sellarlas. Después del tratamiento también es necesario vestir presoterapia.
- Grado IV: Venas varicosas debido a insuficiencia del cayado de las safenas o perforantes. En estos casos existe reflujo venoso e insuficiencia venosa crónica, hay riesgo de úlceras y se producen bastantes molestias. Las venas suelen ser más sobresalientes y anchas. El tratamiento en estas circunstancias debe ser endovascular. Hasta ahora, este tratamiento endovascular suponía una cirugía con bastantes riesgos: la safenectomía, consistente, grosso modo, en arrancar la safena dañada a través de la ingle. En los últimos años, la técnica se ha mejorado gracias a la radiofrecuencia, que permite la posibilidad de sellar la vena con calor mediante un catéter, en vez de arrancarla. Aunque esta mejora se ha extendido mayoritariamente en la sanidad privada. La innovación definitiva en este ámbito se produce con Venaseal, el pegamento para las varices que nos permite solventar el problema sin pasar por quirófano.
Adiós a las molestias con Venaseal
VensSeal, el pegamento para las varices, es el sistema más novedoso, seguro y menos invasivo para el paciente que desea para solucionar los problemas de la insuficiencia venosa crónica, IVC, o reflujo venoso. La IVC se origina cuando las válvulas de las venas que se encargan de facilitar el retorno sanguíneo no funcionan correctamente, causando la acumulación de sangre en las piernas.
La gran ventaja de Venaseal es que sella la vena mediante un adhesivo médico evitando el uso calor para la misma, así como el uso de sedación. Venaseal puede aplicarse con anestesia local, y no requiere el uso de medias de compresión tras el procedimiento. Además, presenta un menor porcentaje de recidiva (que la vena se vuelva a abrir) que otros sistemas, como, por ejemplo, el láser. Es un procedimiento pensado para disminuir infinitamente el periodo de recuperación y la incomodidad de las prendas de presoterapia. Prácticamente no aparecen hematomas ni hinchazones y se puede hacer vida normal de manera casi inmediata tras su aplicación.