Todo lo que debes saber sobre el preoperatorio de la rinoplastia
El Dr. Eduardo Morera Serna es otorrinolaringólogo dedicado, desde hace años, a la Cirugía Plástica Facial en la isla de Mallorca. Dentro del Centro Integral de Otorrinolaringología (CIO) de la Clínica Juaneda, es el especialista en Rinología Avanzada y Cirugía Plástica Facial. Fue el primer médico español en realizar un fellowship en Cirugía Plástica Facial y también, el primero en obtener la Certificación Internacional en Cirugía Plástica Facial. Ha sido pionero en España en algunas técnicas como la rinoplastia ultrasónica o la otoplastia por scoring anterior, y en el momento actual, es el Presidente de la Sociedad Española de Cirugía Plástica Facial. A continuación, nos habla sobre el preoperatorio de la rinoplastia, una de las cirugías que más realiza.
¿Cómo es la primera visita con el cirujano?
En la primera visita con el cirujano se explora interior y exteriormente la nariz, determinando las alteraciones estéticas y funcionales. El/la paciente expresa qué es lo que le gustaría cambiar de su nariz y junto al cirujano se establece cuál sería la nariz ideal para su rostro. En la primera consulta considero muy importante establecer una relación de confianza con el/la paciente, una comunicación fluida que nos permita tener claro a ambos cuál es el objetivo.
Por lo tanto, ¿es fundamental que exponga qué resultados le gustaría conseguir?
Por supuesto. Una de las causas más frecuentes de insatisfacción con el resultado de una rinoplastia es una mala comunicación entre paciente y cirujano. Va a convivir con su nariz el resto de su vida, por lo tanto, su opinión es la más importante; como cirujano puedo hacer sugerencias o explicar distintas opciones, pero la última palabra la tiene siempre el/la paciente.
¿Hay alguna forma de ver cómo le quedaría la nariz?
Sí claro. En mi consulta inicial siempre tomo fotos de la nariz en distintos planos con una cámara profesional y paso las imágenes a un ordenador con un programa de modificación de rasgos faciales. Hacemos la simulación del resultado de la rinoplastia, con distintas opciones, para poder analizar cuál es más adecuada para su rostro. Esas mismas imágenes modificadas de cada paciente, las imprimo y me las llevo a quirófano, para tener presente en todo momento cuál es la forma de la nariz que ha seleccionado.
¿Puede ser de utilidad ver fotos del antes y después?
Sí, por dos motivos. El primero porque el/la paciente puede comprobar si el cirujano hace el procedimiento de manera habitual. Yo les explico que la rinoplastia es una cirugía técnicamente muy demandante, y que para obtener buenos resultados de manera consistente hay que operar muchos casos. En mi cuenta de Instagram pueden ver cientos de casos de rinoplastia operados por mí. En segundo lugar, el/la paciente puede encontrar narices similares a la suya y hacerse una idea real de los cambios esperables tras la cirugía. Ver fotos de antes y después de otras personas operadas por el cirujano es ya lo habitual, antes de llegar por primera vez a la consulta.
¿Qué es lo que más suele preocuparles?
Lo que más les preocupa es obviamente el resultado final de la cirugía, pero no es lo único. Los pacientes me preguntan sobre la técnica que voy a realizar, si voy a dejarles taponamiento, el tiempo de baja social o laboral y cómo va a ser el periodo postoperatorio. Les sorprende cuando les digo que no dejo taponamientos nasales o que la rinoplastia moderna no duele casi nada; la técnica ultrasónica, que llevo haciendo desde más de seis años, ha cambiado completamente el panorama de la recuperación de una rinoplastia.
Generalmente, ¿cuántas citas hay que hacer antes de la operación?
La mayoría de las veces, en la primera consulta, reservan ya la fecha de la cirugía. En otras ocasiones, es necesario pedir pruebas complementarias que se valorarán en una segunda cita o el/la paciente necesita un tiempo para tomar una decisión y programa una segunda visita. Los que viven fuera de la isla son valorados inicialmente por videoconferencia y siempre son valorados de nuevo en persona antes de la cirugía. Siempre les explico, independientemente de que ya estén o no programados para la cirugía, que pueden volver a consulta conmigo cuando quieran para resolver dudas.
¿Estas citas suelen estar incluidas en el precio de la rinoplastia?
El precio de todas las consultas pre y postoperatorias está incluido en el presupuesto que se le da al paciente.
¿Qué pruebas preoperatorias hay que hacer antes de una rinoplastia?
Generalmente, sólo es necesario un estudio preoperatorio que incluye la valoración por un anestesista. Ocasionalmente, es necesario pedir pruebas radiológicas como un TAC de tracto nasosinusal, sobre todo, si el paciente ha sido operado previamente, se ha fracturado la nariz o tiene síntomas de enfermedad inflamatoria crónica nasal.
¿Qué documentos suelen entregar antes de la rinoplastia?
Después de la consulta conmigo, el/la paciente pasa a hablar con la coordinadora quirúrgica, quien le entrega los consentimientos informados y le explica todos los trámites administrativos, reservando una fecha para la cirugía y detallándole cómo se realizan. Respecto a las instrucciones médicas específicas antes de la cirugía, prefiero explicárselas yo personalmente.
¿Qué recomendaciones tienen que seguir antes de la operación?
Los días antes de la operación es importante que el/la paciente prepare su cuerpo para una cirugía, descansando lo suficiente y evitando alimentos que tiendan a aumentar la inflamación.
¿Y el mismo día?
El día de la cirugía debe permanecer en ayunas absolutas desde 6 horas antes de la cirugía e ingresar en la clínica unas horas antes, para realizar la preparación quirúrgica antes de bajar a quirófano. Deben llegar sin ningún maquillaje ni objetos metálicos, incluyendo ropa con elementos metálicos, al quirófano. Hay que quitarse anillos, piercings o ropa interior con alambres. Yo recomiendo que vengan con ropa cómoda y fácil de poner y quitar, para que, al día siguiente, cuando se les da de alta, no tengan que hacer grandes esfuerzos para cambiarse.
¿Para evitar la aparición de moratones, se puede aplicar algún producto o crema?
Sí por supuesto, los días antes de la cirugía hay que evitar medicaciones que interfieran con la coagulación sanguínea (aspirina, ibuprofeno), alimentos enlatados y con tomate y consumir frutas ricas en papaverina como la piña o la papaya. Las pastillas de árnica, una hierba con efectos hemostáticos, también ayudan, así como un ciclo de ácido tranexámico perioperatorio. En el postoperatorio es conveniente evitar el sol los primeros días y, si hay algún moratón, aplicar pomadas como Kelador o Angiogel. Todo ello se lo explico detalladamente porque soy consciente de la importancia de reincorporarse a la vida normal lo más rápidamente posible.
¿Se debe ir acompañado a la operación?
No es imprescindible, pero sí es conveniente. Aunque en la clínica en todo momento hay personal sanitario pendiente del paciente, conviene tener alguien conocido en la habitación para conversar mientras se está esperando para ser bajado a quirófano o en el periodo postoperatorio. Pero, en cualquier caso, no hay problema en venir solo/a al procedimiento.
¿Es cierto que la rinoplastia es una de las cirugías estéticas más complejas?
Sí, eso es cierto y se lo explico a todos mis pacientes. Con más de 1.000 rinoplastias realizadas, he de decir que nunca he operado dos narices iguales, todas son distintas anatómicamente. Además de ello, todas las caras son diferentes y hemos de buscar la nariz que mejor se adapte a los rasgos de cada persona y también, a su sentido estético. Por otro lado, la rinoplastia es una cirugía de altísima exigencia técnica para el cirujano y, sólo después de haber operado muchos pacientes, se puede empezar a ofrecer buenos resultados de manera consistente. Siempre insisto a mis pacientes en que a la hora de seleccionar el cirujano que les va a operar de rinoplastia, comprueben que realiza el procedimiento de manera habitual y que tiene una gran experiencia en ella.
¿Por qué en las pieles gruesas el resultado de la rinoplastia no es tan bueno?
En las pieles gruesas el resultado puede ser tan bueno como en las pieles finas o normales, lo que ocurre es que se han de realizar maniobras quirúrgicas distintas y además, el tiempo que tarda en aparecer el resultado definitivo es mayor. A los pacientes de piel gruesa, que cada vez son más frecuentes en mi consulta, les explico de los cuidados postoperatorios de la piel que vamos a llevar para optimizar el resultado y les digo que el tiempo que van a seguir viniendo a controles postoperatorios va a ser mayor, pues a su nariz va a requerir más cuidados que la nariz de una persona con piel fina o intermedia.
¿Si la persona está resfriada o enferma antes de la operación se debe aplazar?
Sí, una persona enferma o resfriada debe aplazar su cirugía, por el riesgo de desarrollar una complicación mayor de la anestesia. La rinoplastia es una cirugía electiva que se puede reprogramar sin problemas en dos semanas. Por encima de los deseos de paciente y cirujano está la seguridad quirúrgica; en las contadas ocasiones que esto ocurre, entienden perfectamente que su seguridad está por encima de cualquier consideración y se les da fecha tan pronto como sea posible para llevar a cabo la cirugía.
¿Los menores de edad se pueden realizar una operación de nariz?
Sí, pero tienen que cumplirse dos condiciones innegociables. La primera, que se haya completado su crecimiento facial, lo cual se da alrededor de los 15 años en mujeres y de los 16 en hombres. Lo segundo, que sea el/la paciente quien demande la cirugía, no sus personas cercanas. Lo bueno de hacerse la rinoplastia a edades tempranas es que la persona ya interioriza de manera precoz su nueva imagen, en la época que está desarrollando su personalidad adulta y crece con más seguridad en sí mismo/a y autoestima.