¿Qué son los fillers faciales?
El rostro es una de las partes del cuerpo que más acusa el paso del tiempo. La cara está siempre expuesta y por eso su piel es mucho más sensible y se estropea antes que la de otras zonas del cuerpo. Existen múltiples tratamientos de cirugía estética que tienen como finalidad acabar con la flacidez y con las arrugas en el rostro. Pero también es cierto que desde hace dos décadas los tratamientos no invasivos han ido mejorando y a día de hoy pueden sustituir en muchas ocasiones al paso por quirófano.
Los fillers o rellenos faciales han supuesto toda una revolución en medicina estética. Se trata de productos elaborados a base de materiales biocompatibles que se encargan de proporcionar volumen a la cara y rellenar los huecos y surcos marcados por las arrugas. En algunos casos, como en el surco nasogeniano, los rellenos pueden dar incluso mejor resultado que un lifting facial.
Procedimiento de los fillers
Luego veremos que para hacer el relleno se pueden utilizar diferentes sustancias, pero con independencia del material elegido el proceso para hacer la infiltración suele ser siempre el mismo.
En primer lugar se aplica anestesia local sobre la zona a tratar para disminuir las molestias al paciente y una vez que la zona está dormida se realiza la infiltración del producto elegido con agujas muy finas.
Es una técnica mínimamente invasiva, por lo que el paciente puede reincorporarse de forma inmediata a su rutina cotidiana.
Duración de los efectos
Los fillers faciales tienen una duración variable en función del material de relleno elegido. Lo normal es que duren de 6 meses a 2 años.
Existen también rellenos que tienen un carácter permanente, pero no son aconsejados por los expertos. Si el resultado no es el esperado y el relleno usado es temporal sus efectos desaparecerán en unos meses, recuperando el paciente la naturalidad de su rostro. Es más, productos como el ácido hialurónico se pueden eliminar de forma inmediata gracias a unas encimas.
En el caso de rellenos permanentes, si el resultado final no es el esperado puede que ya no haya solución o que cueste mucho eliminar el relleno infiltrado.
Sustancias para relleno
El colágeno bovino fue la primera sustancia aprobada por la FDA de Estados Unidos para realizar rellenos faciales. Desde 1982 se viene usando para rellenar los pliegues que van desde la nariz a las comisuras de la boca.
En 1996 la FDA aprobó el uso del ácido hialurónico como relleno facial. A día de hoy es una de las sustancias más empleadas y de hecho casi el 85% de los fillers faciales se realizan con él. Tiene a su favor que tiene muy pocas contraindicaciones, el cuerpo lo absorbe de forma natural con el paso del tiempo y rellena las arrugas dejando el rostro con un aspecto bastante natural.
En los últimos años, famosas actrices de Hollywood han sido el mejor escaparate de lo que el abuso de los inyectables pueden hacer, consiguiendo rostros carentes de toda expresión. Por eso en la actualidad se buscan resultados mucho más naturales combinando tratamientos.
En la actualidad los tratamientos de relleno facial más populares son los que combinan el uso de ácido hialurónico en la mitad inferior del rostro.
Rellenos prohibidos
Existen materiales para rellenos faciales que en otros momentos han estado muy de moda pero que ahora no se usan, algunos incluso han sido prohibidos. Un claro ejemplo de ello es la silicona que hace dos décadas se usaba para el aumento de labios. A día de hoy su utilización con este fin está prohibida y los aumentos de labios se hacen con ácido hialurónico. Con este último material los resultados son temporales, pero mucho más naturales y más seguros.
Los rellenos derivados de productos plásticos y otros como el metil metacrilato están ya prohibidos en muchas partes del mundo.
La importancia del especialista para aplicar rellenos
A la hora de realizarse un relleno facial es imprescindible escoger un material que sea legal y de una marca homologada. Pero también es muy importante que las infiltraciones sean realizadas por un especialista.
Lo más aconsejable es acudir a una clínica médico-estética en la que los tratamientos sean aplicados por un médico o bajo su supervisión.
Sólo un verdadero especialista puede aconsejar al paciente sobre el relleno que es mejor utilizar en su caso, informándole de todos los pros y los contras de su elección.
Efectos secundarios de los fillers faciales
Los rellenos faciales efectuados con productos homologados y por médicos especialistas no suelen provocar ningún efecto secundario importante. Es normal que en las horas siguientes al tratamiento la cara del paciente pueda estar algo enrojecida e incluso un poco inflamada, también es común que se aprecien las marcas de la aguja. Todos estos efectos desaparecen en apenas unas horas.
El paciente que se somete a un tratamiento de este tipo no tiene que tener ningún cuidado especial con la piel más allá de aplicar la rutina diaria de cuidado facial que venía aplicando antes del tratamiento. Esto implica usar a diario una crema hidratante para el rostro adecuada para el tipo de piel que se tenga y usar un protector solar para el rostro tanto en verano como en invierno. En el caso de las mujeres es imprescindible que el maquillaje sea retirado cada noche antes de irse a dormir, en caso contrario la piel no podrá respirar adecuadamente y los efectos del envejecimiento cutáneo serán todavía más pronunciados.
Con un buen cuidado de la piel a diario, y el uso moderado de tratamientos de relleno facial de calidad, se consigue que el paso del tiempo en el rostro se vaya notando de forma mucho más gradual, mejorando el aspecto de la piel y haciendo que parezca más joven de lo que realmente es.