Otoplastia, la cirugía de las orejas
Se trata de una sencilla intervención quirúrgica que corrige las alteraciones de la forma y posición de las orejas. Lo más frecuente es realizarla cuando las orejas están "separadas" de la cabeza, o "muy abiertas".
Objetivos de una otoplastia
- Estos problemas estéticos de forma o posición de las orejas pueden generar en algunas personas problemas psicológicos, y forzándoles a llevar el cabello largo para intentar tapar el defecto. Incluso, en niños, puede provocar una alteración en la relación con los demás niños e incluso un retraso escolar. Con esta simple intervención, podemos ayudar a evitar o solucionar dichos problemas.
- Cada paciente tiene una alteración distinta de las orejas, e incluso algunos tienen sólo un defecto de forma en una sola, siendo la otra oreja normal. Por ello, se debe tratar de manera INDIVIDUAL Y PERSONAL cada paciente.
- Operar las orejas suele ser muy satisfactorio para el paciente y el médico, e incluso eliminar los "complejos" del mismo. La práctica de la Medicina y la Cirugía Estética no es una ciencia exacta, y aunque se esperan excelentes resultados, no hay garantías explícita o implícita sobre los resultados que pueden obtenerse.
Anestesia
- Habitualmente una otoplastia se puede realizar con anestesia local y sedación suave, sin necesitar ingreso hospitalario.
- En niños y en pacientes que así lo deseen se puede realizar con anestesia general, y una corta estancia hospitalaria en la clínica.
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Incisiones:
En la mayoría de casos se realiza exclusivamente mediante una incisión en la parte posterior de las orejas, por lo que no quedan cicatrices visibles, a no ser que quieran verse separando las orejas con la mano. En casos excepcionales pueden ser necesarias incisiones en la parte anterior de las mismas.
Esta intervención comporta el llevar una cinta elástica por el día durante 5-7 días, y a una cinta más ancha para dormir durante 2 semanas.
Tratamientos Alternativos:
Aparte de no realizar la intervención, no hay tratamientos alternativos posibles a la otoplastia.
Riesgos de una otoplastia:
Como en cualquier procedimiento quirúrgico, en una otoplastia existen unas peculiaridades evolutivas específicas y unos mínimos riesgos de complicaciones en la intervención. Aunque, es preciso decir que aunque la gran mayoría de las personas que entran a quirófano no sufren dichas complicaciones, el paciente ha de conocerlas y ser informado de todos los detalles.
Hemos de señalar que los beneficios de esta intervención son mucho mayores que los inconvenientes de la misma.
Estos riesgos son:
- Infección. La aparición de una infección es inusual. Para evitarla damos antibióticos en el postoperatorio. Si la hubiera, podría necesitar un retoque quirúrgico.
- Hematoma. Si aparece, se trata de un hematoma superficial, y se elimina espontáneamente. En casos excepcionales podría necesitar un drenaje del mismo.
- Recidiva. Consiste en una separación de la o las orejas después de la intervención. Si ocurre esta separación, siempre es mucho menos visible que la situación previa a la intervención. Ocurre tardíamente, hacia las 4-6 semanas después de la misma. En estas circunstancias, se puede requerir un retoque con anestesia local, lo cual se realiza a los 4-6 meses.
- Otros problemas, como son la aparición de cicatrices hipertróficas, están descritos como casos excepcionales en la literatura médica.
Una vez realizada la intervención de otoplastia, deben seguirse controles postoperatorios hasta un mínimo de tres meses después de la misma.
Evolución:
- El dolor postoperatorio de la otoplastia es generalmente leve, y desaparece a las 24-48 horas. Requiere como máximo una analgesia suave.
- Posteriormente, se suele retirar las suturas a los 6-7 días, durante los cuales la oreja tiene un cierto enrojecimiento e hinchazón, que desaparece en este tiempo. En raros casos, pueden eliminarse por la piel durante uno o dos meses algún hilo de sutura interno, los cuales se retiran sin ningún problema.
- Debido a lo anterior, se tiene que tomar en cuenta que la baja laboral mínima después de la intervención es de 24 horas. En los casos de que al paciente le importe que le vean con la banda elástica, sobre todo hombres, pueden ser necesarios de 5 a 6 días.
