Liposucción: ¿Cómo saber cuál es la mejor técnica?
La liposucción es una de las cirugías estéticas más demandada por nuestros pacientes. Consiste en la eliminación de la grasa acumulada en el cuerpo que no somo capaces de eliminar con buenos hábitos alimentarios y la práctica de deporte. Es importante saber que existen diferentes técnicas para realizar una liposucción, y conocerlas todas te ayudará a decantarte por una u otra en función de tu caso.
La Dra. Eva Lumbreras, cirujana referente en liposucción en Clínica FEMM, nos explica cuáles son los tipos de liposucción que existen para que, en función de nuestras características y necesidades, sepamos cual es la que mejor se adapta según nuestro caso.
Liposucción tradicional o convencional
Cuando la acumulación de grasa está muy localizada en una zona - cartucheras, flancos, abdomen, etc- y la calidad de la piel es buena, este tipo de liposucción es el más común; en personas que presenten patologías tales como enfermedades cardiovasculares o problemas en la coagulación de la sangre no sería la mejor opción.
Este tipo de intervención se puede realizar con anestesia local únicamente o con anestesia local y sedación de forma ambulatoria, infiltrando una solución anestésica y aspirando la grasa con la cánula.
Liposucción ultrasónica
Este tipo de liposucción se realiza ayudándose de las ondas ultrasónicas para fragmentar y licuar la grasa antes de extraerla, por lo que, al facilitar el trabajo manual del cirujano, los tejidos se ven menos afectados.
La liposucción ultrasónica es muy buena opción para zonas en las que la fibrosis está más presente, como pueden ser la espalda, la parte superior de los brazos o el pecho. Los casos de liposucción secundaria también serían ideales para esta técnica.
Están contraindicados para este tipo de intervención los pacientes con enfermedades cardiovasculares, problemas en la coagulación de la sangre y portadores de dispositivos electrónicos implantados (marcapasos).
Liposucción con vibroliposuctor (PAL)
Este tipo de liposucción es ideal cuando las cantidades a extraer de grasa son más elevadas. Se realiza con una cánula que va unida a un vibroliposuctor, también conocido como PAL (Power Assisted Liposuction), y que, gracias a la energía vibratoria se realiza de una forma menos agresiva al respetar más los tejidos que rodean la zona, lo que provoca que el paciente tenga menos hematomas y dolor. También, al requerir menos esfuerzo físico, permite llegar al cirujano al final del proceso quirúrgico más descansado.
La recuperación del paciente es más rápida y tiene menos molestias con este tipo de liposucción que con la liposucción tradicional, ya que los tejidos se ven menos alterados y el procedimiento es menos agresivo.
La Dra. Lumbreras nos indica que este tipo de técnica es perfecta para liposucción en zonas como las caderas, los muslos, los flancos o el abdomen.
Liposucción asistida por agua
La liposucción asistida por agua es más antigua y menos común que las técnicas anteriores. Consiste en el empleo de un dispositivo que expulsa agua a presión para separar y extraer la grasa durante la intervención.
Con este tipo de técnica también se produce un menor daño en los tejidos y vasos sanguíneos que rodean la zona. La recuperación es más rápida que en una liposucción tradicional y puede estar recomendada en zonas como los muslos, caderas o abdomen; no es la mejor opción si las cantidades de grasa a eliminar son muy grandes.
Procedimiento a seguir para la realización de una liposucción
Antes de la operación
1. La consulta de valoración.
Cuando el paciente ha decidido o se está planteando realizarse una liposucción, lo más importante y lo primero es informarse con un especialista cualificado. En esta consulta, el cirujano debe valorar sus antecedentes, historia clínica, expectativas del paciente y realizar una exploración minuciosa para poder aconsejarle qué tipo de intervención es la más adecuada en su caso, y explicársela de forma personalizada.
En esta consulta también se le explicará al paciente todo el proceso preoperatorio, indicándole qué pruebas debe realizarse de cara a la cirugía, y cómo será el postoperatorio.
También se indicará disponibilidad de quirófano y presupuesto de la intervención atendiendo a las necesidades de ese paciente tras la valoración.
2. Segunda consulta
Es normal que tras la primera consulta al paciente le surjan dudas en cuanto al proceso, por lo que es adecuado que acuda a una segunda consulta si fuera necesario para solucionar dudas, concretar plan quirúrgico y pasos a seguir hasta el momento de la intervención: posibles fechas de quirófanos, lectura de consentimientos y resolución de interrogantes.
3. Consulta de cierre
En esta consulta, antes de la intervención, el paciente recibe los volantes para las pruebas preoperatorias, se firman los consentimientos, se dan pautas para antes y después de la intervención y recetas con la medicación pautada.
En dichas consultas es posible la realización de fotografías para estudio más detallado del caso o, en su defecto, en el quirófano. Es importante el documento gráfico para evaluar los resultados postoperatorios y comparar el antes y el después.
Operación
El día de la intervención están con el paciente su cirujano, el equipo de enfermería y el anestesista.
Una vez termine la cirugía, al paciente se le traslada a una sala de reanimación donde estará acompañado y vigilado hasta el momento del alta.
Tras la intervención, si no es un procedimiento ambulatorio, es probable que el paciente permanezca ingresado un día. El control postoperatorio tras la intervención durante la hospitalización es un acto de seguridad para el paciente.
Después de la intervención. Cuidados posteriores
Los cuidados postoperatorios es una parte fundamental de proceso. El seguimiento de las indicaciones propuestas por el cirujano y el equipo de enfermería y/o personal de apoyo es considerable para la consecución de unos resultados óptimos.
Tras la operación, el paciente llevará una faja que no podrá quitarse hasta la primera revisión y que, según lo que aconseje el especialista, es recomendable mantener al menos durante el primer mes.
El paciente debe acudir con el cirujano a las revisiones que sean necesarias; en ellas le irán indicando las recomendaciones a seguir tras valorar su evolución.
Si tienes dudas sobre qué tipo de liposucción es la más adecuada para ti, solicita una cita con uno de nuestros cirujanos especializados en esta intervención.
