Liposonic: la liposucción sin cirugía
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La liposucción es un método rápido para perder volumen y grasas localizadas de una forma rápida y fácil, pero al ser una intervención quirúrgica también implica molestias y un proceso de recuperación. El liposonic, en cambio, es una liposucción sin cirugía que, aunque a más largo plazo, consigue resultados muy parecidos mediante ondas ultrasónicas.
En ocasiones, la grasa no está relacionada con el sobrepeso ni con la ausencia de ejercicio físico, pues puede aparecer aún haciendo deporte o siguiendo una dieta sana y equilibrada. Por eso, la medicina y cirugía estética ofrece tratamientos para solucionar algunos de esos problemas y que requieren siempre del diagnóstico de un profesional en medicina estética. Tratamientos como la lipoescultura, las ondas de choque o la liposucción son formas muy diferentes de perder grasa localizada. De hecho, la liposucción es el modo más drástico de perder volumen de manera inmediata, así como de eliminar la grasa localizada, pero, naturalmente, tratándose de una intervención quirúrgica, implica ciertas molestias y requiere de un proceso de recuperación. Por esta razón, algunas personas desean probar con otros métodos no quirúrgicos que no conlleven un proceso posoperatorio y cuya recuperación sea rápida para no tener que ausentarse del trabajo o simplemente, por no tener que pasar por una operación, la anestesia, la faja postoperatorio y todo lo que requiere una cirugía estética de este tipo.
¿Qué es el Liposonic?
Liposonic se puede describir perfectamente como una liposucción sin cirugía. Se trata de un método no invasivo que permite eliminar los depósitos de grasa sin ningún tipo de esfuerzo. Se realiza en la consulta de un especialista a través de unas ondas ultrasónicas de hasta 30W de potencia. Durante el tratamiento, el sistema rompe estructuras de fibras conectivas de grasas como las de la celulitis o los adipocitos (tejido adiposo).
Esto se consigue ya que algunas de las ondas son de presión positiva y otras negativa, por lo cual se confrontan y forman unas nanoburbujas que se van acumulando. Llega un momento en que estas burbujas crecen de tal manera que se vuelven inestables e implosionan dentro del panículo adiposo. De esta manera, a través de la energía que se crea con la explosión de las burbujas, se libera el torrente sanguíneo de ácidos grasos y glicerol que serán eliminados por nuestro cuerpo de forma natural, a través del sistema linfático y las vías urinarias. El proceso se repite una y otra vez ya que la energía neta de la implosión genera ondas de choque que generan nuevas nanoburbujas que repiten el proceso cíclicamente de forma decreciente.
¿Qué resultados ofrece el Liposonic?
Por tanto, además de reducir grasa, gracias al Liposonic desaparece también el volumen que ocupaban estos adipocitos. Aunque la grasa es destruida, hemos de tener en cuenta que la piel ni los tejidos adyacentes resultan dañados en ningún momento por los ultrasonidos, sino al contrario, se reafirman y mejoran su aspecto. En resumen, podríamos decir que el Liposonic logra:
- Reducir la celulitis.
- Modelar el contorno corporal.
- Aumentar la elasticidad de los tejidos.
- Mejorar la tonicidad de la piel.
- Reactivar la microcirculación cutánea.
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¿Quién puede someterse al tratamiento de Liposonic?
Cualquier persona ya sea hombre o mujer con grasa localizada o celulitis es objetivo para Liposonic. Se recomienda para pacientes con lipodistrofias, fibrosis en general u otros problemas de volumen, sobre todo en abdomen, cartucheras y muslos. Sin embargo, está contraindicado para embarazadas, pacientes con procesos tumorales o prótesis metálicas y personas con problema renales o hepáticos.
¿Cómo se realiza el Liposonic?
El proceso para el paciente puede durar entre 8 y 12 sesiones (una sesión de entre media y una hora de duración, una vez por semana), dependiendo de las necesidades de cada persona. El proceso es indoloro, no supone riesgos y no requiere de ningún tipo de cuidado posterior. Hemos de tener en cuenta, que Liposonic, no es sólo el nombre del tratamiento sin cirugía, sino que también se llama así a la tecnología que lo lleva a cabo.
El tratamiento se suele cumplimentar con la aplicación previa de un gel con sustancias activas y la posterior aplicación de vendas frías y de un masaje de drenaje linfático para mejorar su efectividad. Este último drenaje favorecerá la movilización de los tejidos y la eliminación de los residuos resultantes del Liposonic. El proceso es efectivo tras las sesiones recomendadas, pero se debe seguir una dieta saludable y un mínimo ejercicio para mantener los resultados.
Postratamiento
La aplicación de ondas ultrasónicas con el aparato Liposonic es indoloro, no comporta riesgos y no requiere de ningún tipo de terapia posoperatoria. Normalmente, se aplica antes un gel que contiene sustancias activas para hacer más efectivo el método. Cuando finaliza el tratamiento se pueden aplicar paños fríos en la zona y realizar masajes para mejorar el drenaje linfático. De este modo, se reactivan los tejidos y se favorece la eliminación de las toxinas y de la grasa liberada con la aplicación del Liposonic. Por lo tanto, una de las grandes ventajes del Liposonic frente a la liposucción es que el paciente podrá volver de forma inmediata a sus actividades cotidianas sin necesidad de pedir una baja o pasar un postoperatorio guardando reposo.
Hay que tener en cuenta que cuando se termina el tratamiento los resultados son muy evidentes, pero es necesario seguir una dieta sana y practicar ejercicio físico para mantenerse estable a largo plazo y mejorar los resultados conseguidos.
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