«French touch» el rejuvenecimiento facial con resultados naturales
Arrugas y líneas de expresión, piel flácida, seca y apagada, manchas… Las marcas que los años dejan en nuestro rostro son la mejor prueba de que cumplir años nos afecta a todos por igual. Aunque de manera general estemos contentos por cómo nos trata el paso del tiempo, podemos retrasar el envejecimiento asociado a la edad sin que el tratamiento quirúrgico sea evidente.
Contrarrestar el envejecimiento cutáneo, ponerle freno a la formación de arrugas y retrasar las huellas de la edad en nuestra piel, a la par que se consigue mostrar una apariencia más joven y natural, constituyen la base de todo tratamiento de rejuvenecimiento que se precie. La medicina estética ofrece una variedad amplia de tratamientos para alcanzar nuestro objetivo, que no suele ser otro que lucir una piel tersa, hidratada, luminosa y sin arrugas, sin que por ello los resultados muestren la característica apariencia que evidencia el paso por el quirófano. La naturalidad es, en el seno del rejuvenecimiento facial, la máxima premisa.
Por ello, desde hace unos años hemos asistido a la creación de conceptos como el «french touch» para hacer alusión a una cirugía que huye de expresiones frías, congeladas y antinaturales, de facciones hinchadas o artificiales, y que aspira a buscar la armonía de las facciones sin que estas se transformen, es decir, a buscar la naturalidad de los resultados.
Qué es el «french touch» o toque francés
El «french touch», o toque francés es, por tanto, una intervención quirúrgica personalizada, como todas, pero, sobre todo, hecha a medida, puesto que el cirujano tiene en cuenta no solo la estética del paciente, sino también su personalidad, su ritmo y su estilo de vida. De este modo, el especialista podrá mantener algunas líneas de expresión que remarquen la personalidad de la persona. Se evita, por tanto, que esta adquiera una expresión que no denote sus características o cualidades personalidades, su carisma a causa de la cirugía. Es decir, que aparezca más joven y rejuvenecida pero no distinta. Por eso, se considera una operación proyectada a medida de cada paciente.
Como no se busca transformar las expresiones o la cara de un paciente sino rejuvenecerlas, las diversas actuaciones que comprende el toque francés son las siguientes:
Lifting. Como no podía ser de otro modo, para reducir las arrugas y las líneas de expresión y estirar la piel se puede realizar un lifting en la cara y el cuello. A esta operación se la ha denominado Novi Lift (No Visible Incision Lift), puesto que las incisiones para realizar el estiramiento facial no son visibles, ya que las cicatrices quedan ocultas bajo el pelo. La incidencia del lifting es sumamente discreta; el cirujano busca en todo momento que el paciente rejuvenezca su mirada y reduzca las líneas de expresión sin que ello se note. Por eso, se permite que queden algunas ligeras arrugas en áreas que conjugan con la belleza de la persona, que la realzan y que le dan ese toque atractivo y natural que se busca.
Ácido hialurónico. También se recurre a otros productos estéticos asociados al rejuvenecimiento, como el ácido hialurónico, que también se emplea dosificado para no alterar en exceso la estética del paciente.
↪️ Relacionado: El Pave-lift, lo último en rejuvenecimiento facial
Qué objetivos persigue el «french touch»
Obviamente, busca el rejuvenecimiento facial, busca que las huellas que el paso del tiempo deja en el rostro de las personas se reduzcan, busca que se luzca una apariencia juvenil a la par que armónica con su personalidad, pero también con su edad. Con el «french touch» se desea evitar la artificiosidad de algunas intervenciones, la desnaturalización de determinados tratamientos estéticos, la estandarización de la medicina y cirugía estética…
Pero, además, se pretende huir de esas intervenciones o actuaciones cuyos resultados no son armónicos con el físico de la persona, con sus emociones o personalidad, con sus rasgos específicos o con su edad. No se quiere que un paciente operado haya rejuvenecido tanto que se note la operación estética o que se haya intervenido de manera tan drástica o intensa que se haya acabado cambiando completamente sus rasgos cuando este sonríe o gesticula. Tampoco se quieren modificar aquellos rasgos especiales que pueden haber sido fruto de mezcla de culturas o de mestizaje, sino todo lo contrario. Las actuaciones realizadas buscarán destacarlos como partes del atractivo personal de ese individuo.
↪️ Relacionado: Minilifting de mejillas, ¿sabes en qué consiste?
De este modo, el «french touch» persigue que los tratamientos encaminados a retrasar el envejecimiento y conseguir una apariencia más joven y luminosa no sean evidentes. De ahí que las intervenciones sean siempre graduales, sutiles, suaves… Y de ahí que en muchas ocasiones esas intervenciones permitan que se mantengan marcas de expresión como parte del deseo de personalizar el tratamiento y hacer invisible las intervenciones del cirujano.
Así que ya sabes, si estás pensando en rejuvenecer tu rostro, si quieres quitarte unos años de encima sin que se note que has pasado por el quirófano y sin que la cirugía te deje secuelas, si buscas seguir manteniendo tu esencia, tus rasgos faciales, tus características especiales con unos resultados naturales, que conjuguen con tu personalidad y con tu edad pero que realcen tu atractivo, pásate al «french touch».
↪️ ¿No sabes qué profesionales elegir? ¿Tienes dudas sobre qué tratamiento facial sería mejor para ti? Entra en nuestro foro y soluciona todas tus dudas