Las claves de la electroestimulación
La electroestimulación ha pasado a ser una forma de ejercitación muscular y recuperación de lesiones para deportistas, a la práctica de moda entre aquellos que quieren resultados rápidos para ponerse en forma. Veamos sus claves.
La electroestimulación se define como la forma de ejercitar los músculos utilizando impulsos eléctricos. Estos impulsos se traspasan a través de unos electrodos que se colocan cerca de los músculos donde se quieren ejercitar. Esta técnica no es más que un intento de imitación de la contracción muscular que genera nuestro propio sistema nervioso.
Electroestimulación estética
Dentro de la estética se utiliza como método adelgazante, anticelulitis y antiflacidez. Pese a ello y, tal como asegura la SEME (Sociedad española de Medicina Estética), la electroestimulación sólo será efectiva si se acompaña de ejercicio físico aeróbico y una dieta equilibrada. Hemos de tener en cuenta que para perder calorias se debe realizar ejercicio porque es la única manera de ejercitar varios grupos de músculos a la vez.
La electroestimulación es un tratamiento que trata los músculos subyacentes y sus objetivos son evitar la flacidez, estimular el músculo para aumentar su gasto energético y mejorar la insuficiencia venosa. De esta manera los músculos adquieren fuerza y resistencia. Para completar una pérdida de volumen, se debe drenar la zona para eliminar la grasa localizada que ha disuelto el electroestimulador. Los aparatos tienen diferentes programas para cada caso; para combatir el dolor, problemas de circulación, casos de rehabilitación o tonificar/adelgazar.
El aparato que produce la electroestimulación, sólo puede actuar sobre zonas musculares de una en una, por eso, hay que realizar varias sesiones. Pese a ser una técnica bastante efectiva hay que tener en cuenta que está desaconsejada para determinadas personas;
- Las que padezcan una enfermedad grave, infecciosas o cáncer
- Embarazadas
- Mucha fiebre (más de 38)
- Las que tengan enfermedades cardíacas
- Las que tengan tumores
- Personas que deban mantener reposo
Aunque hemos comentado que la electroestimulación es sólo un complemento más para mantener una buena salud física, también hemos de recordar sus ventajas: permite trabajar zonas localizadas, ejercita un mayor número de fibras musculares que el ejercicio voluntario al realizar deporte, no requiere de esfuerzo ni cansancio para el paciente y no se sobrecargan las articulaciones como puede pasar al realizar ejercicio físico.
No se trata de gimnasia pasiva, sino activa
Seguro que más de una vez has visto esos anuncios de televisión donde venden unas máquinas milagrosas con ventosas que, colocándolas sobre determinadas zonas del cuerpo, te prometen conseguir sin moverte del sofá un cuerpo 10. No te confundas, para que la electroestimulación sea realmente beneficiosa tiene que combinar dos variables: el ejercicio físico y el uso del sistema de electroestimulación. Se trata de hacer ejercicio con la máquina conectada a tu cuerpo, para así maximizar el rendimiento.
Ahorra tiempo
Gracias a la electroestimulación en poco tiempo puedes ejercitar todos los músculos del cuerpo y además es una técnica que combina la tonificación de los músculos con el ejercicio cardiovascular. Es decir, se trata de una técnica realmente completa, aunque generalmente se utiliza como complemento a un plan de entrenamiento físico.
Multiplica el esfuerzo
Las corrientes eléctricas del sistema de electroestimulación hacen que, mientras tú haces ejercicio, los músculos trabajen más, por lo que estás multiplicando tu esfuerzo. Se trata de sesiones de alta intensidad de una duración determinada -no son sesiones muy largas-, acompañada de un entrenador especializado en electroestimulación, que te ayudará y guiará a realizar los ejercicios idóneos sin peligro de lesiones.
Nada de milagros
La electroestimulación no tiene nada de milagroso. Se trata de un entrenamiento integral con ejercicio físico generalmente de alta intensidad que utiliza los impulsos de corriente eléctrica para maximizar el esfuerzo, y así los resultados.
Los técnicos especializados en este tipo de gimnasia aseguran que con tan solo 25 minutos a la semana cualquier persona puede conseguir estar en forma. Eso sí, hay que ser constante y seguir una dieta equilibrada. No creas que mientras estés viendo la televisión o haciéndote la manicura en casa conseguirás los resultados que buscas.
Ventajas
- Mayor alcance del ejercicio. Durante la electroestimulación se alcanzan y se activan fibras que no pueden trabajarse de forma voluntaria durante el ejercicio normal o en el gimnasio.
- Recomendado para las personas con poco tiempo. Se puede realizar durante actividades cotidianas o durante el trabajo, ya que los músculos trabajarán de forma automática gracias a los impulsos eléctricos.
- Escasa fatiga del sistema nervioso y muscular. No existirán agujetas ni cansancio tras el ejercicio gracias a que es un sistema de estimulación pasivo.
- Los resultados son visibles con mayor rapidez y a corto plazo.
- Ayuda a eliminar líquidos y mejora la circulación de la sangre, así que es beneficioso para tratar aspectos como la celulitis.
- Trabajo más específico y dirigido. Permite activar zonas concretas del cuerpo y realizar un trabajo muy centrado en grupos musculares específicos.
Inconvenientes
- Aumenta el riesgo de lesiones. Cuando trabajamos en el gimnasio para aumentar la densidad muscular no solo estamos fortaleciendo nuestros músculos, sino también nuestros ligamentos y tendones. En el caso de la electroestimulación estos elementos no se trabajan. Una persona con una musculatura fuerte, pero con unos ligamentos y tendones débiles, es más propensa a lesiones.
- No fomenta la coordinación ni el control muscular. Al tratarse de impulsos involuntarios provocados por el aparato de electroestimulación, nuestro cerebro desconectará y no habrá conexión ni órdenes voluntarias de contracción hacia el músculo.
- Mínimo volumen muscular. Los resultados que se consiguen pueden tonificar ligeramente nuestro cuerpo, pero nunca conseguiremos el mismo volumen muscular que haciendo ejercicio o trabajando en el gimnasio.
- Numerosas contraindicaciones. La electroestimulación está totalmente contraindicada en casos de epilepsia, marcapasos, heridas superficiales, tumores, embarazos, arritmias, entre otras muchas situaciones.
- Fallos renales (solo en casos extremos). Cuando hay mucha fatiga se segrega una hormona que se puede trasladar a la sangre y llegar hasta el riñón, provocando fallos renales a causa del exceso de ejercicio.
Electrofitness
En el último año, una nueva disciplina que combina ejercicio físico y electroestimulación se ha puesto de moda. Muchos deportistas ya la utilizaban para la recuperación tras lesionarse, pero a día de hoy muchos son los que recurren al electrofitness para realizar ejercicio más efectivo en menos tiempo. A través de un traje lleno de electrodos que dan pequeñas descargas eléctricas - apenas perceptibles por nuestro cuerpo - una persona realiza unos 25 minutos a la semana de simples ejercicios que no requieren gran cansancio y consigue una buena forma física, que de otra manera supondría horas y horas en el gimnasio. Como en la electroestimulación las personas enfermas, con problemas cardíacos o embarazadas deben evitar este tipo de ejercicios.