"La blefaroplastia es una intervención habitual a partir de los 40"

El Dr. José Manuel Márquez es el director médico de la Clínica Medical Class de Terrassa desde su fundación, así como el responsable médico de la marca Dermatique de dermocosmética y nutricosmética. A parte de la licenciatura en medicina y cirugía, a través de los años se ha formado en diferentes campos como Diplomado en Medicina y Cirugía Estética, también en Medicina del Envejecimiento, en Cirugía Estética. Además, está acreditado en capacitación en Medicina Cosmética y Estética por el Colegio Oficial de Médicos de Barcelona. A continuación, nos habla de la blefaroplastia, la cirugía que permite mejorar los párpados y rejuvenecer la mirada.

¿Por qué envejece la zona de los ojos?

El contorno de los ojos está formado por la piel más delgada de nuestro cuerpo. Con el paso de los años, disminuye la capacidad de producir colágeno y elastina, que son sustancias básicas en la firmeza de nuestra piel, con lo que el tejido del contorno de los ojos pierde volumen y se produce un descolgamiento de estas estructuras. Existe además un debilitamiento de los grupos musculares de esta zona, especialmente por la gran actividad muscular del parpadeo (unas 500 veces cada hora), esto puede provocar una herniación de la grasa provocando las bolsas palpebrales.

Otros factores son la exposición solar, el estrés, distintos tóxicos y, por supuesto, la herencia genética.

¿Se puede prevenir este envejecimiento?

Sí, se puede prevenir. Quizás el gesto más sencillo sea el más importante: la protección solar (gafas de sol, cremas, etc). No abusar de las pantallas de ordenador y demás, un buen descanso nocturno, una dieta equilibrada y no consumir tóxicos sin duda, ayudarán a retrasar los signos de envejecimiento de la zona de los ojos.

Recomendamos además, productos específicos para esta zona capaces de rehidratar esta piel aportando colágeno y elastina y así, haciéndola más resistente a la flacidez.

¿Para qué pacientes está indicada la blefaroplastia?

Existen básicamente dos zonas distintas en el contorno de los ojos, el párpado superior y el inferior. Son anatómicamente distintos y, por tanto, el tratamiento también.

En cuanto al párpado superior, los pacientes en los que está indicada esta intervención son los que tienen un exceso de piel que llega a apoyarse, a veces, sobre las pestañas. Essto puede ir asociado a acúmulos de grasa especialmente en la zona interna (junto a la nariz). El motivo básico de este trastorno es el envejecimiento y la pérdida de elasticidad del párpado superior.

El párpado inferior presenta, en ocasiones, un abultamiento (bolsas) provocado por la herniación de la grasa a través de una musculatura debilitada. Este proceso está más relacionado con la herencia genética y puede darse en personas jóvenes.

¿Qué tipos de blefaroplastia se puede realizar?

En principio 2, la del párpado superior y la del inferior. La del párpado superior es prácticamente igual en todos los pacientes, resección de la piel sobrante y extirpando o recolocando la grasa antiestética. En el párpado inferior es importante adaptar la técnica a cada caso en particular, pero para simplificar hablaremos de las 2 técnicas básicas:

• Técnica transconjuntival: está indicada en pacientes sin piel sobrante en el párpado inferior y la realizamos habitualmente en pacientes jóvenes. Extraemos o recolocamos la grasa sobrante a través de la conjuntiva por la parte interior del ojo.
• Técnica subciliar: con esta técnica eliminamos o recolocamos la grasa sobrante pero además, nos permite eliminar la piel sobrante del párpado inferior. La incisión se realiza justo por debajo de las pestañas y, tras unas semanas, es absolutamente invisible.

Existen técnicas complementarias para tratar casos de laxitud del párpado, la cantoplastia y la cantopexia, con ellas tensamos las zonas fláccidas.

¿Es posible rejuvenecer la mirada sin cirugía?

Por supuesto, utilizamos diferentes técnicas según cada caso. En los casos de “ojeras” el implante de acido hialurónico especifico para esta zona permite rellenarlas fácilmente. También colocamos hilos para elevar las cejas. Y por supuesto, se aplican una o más técnicas a la vez.

¿Qué pacientes suelen realizarse la blefaroplastia?

A partir de los 40 años es una intervención habitual tanto en hombres como en mujeres aunque, estas últimas, optan por este tratamiento en un estado más inicial del proceso de envejecimiento.

¿En qué casos no se recomienda la cirugía de los párpados?

No se debe realizar una blefaroplastia en casos de problemas de coagulación y/o de cicatrización. Tampoco durante un embarazo ni en casos de alergia a los anestésicos, en casos de desprendimientos de retina ni cuando exista una infección. Estos serían los casos de contraindicación absoluta. Existen otros casos que hay que valorar muy bien la indicación de la cirugía. Por ejemplo, los pacientes con exoftalmos (ojos saltones) también en casos de laxitud de los músculos ciliares inferiores. Y muy importante, cuando las expectativas del paciente no son reales o simplemente no le hace falta.

¿Cómo es la primera cita con el cirujano?

La primera visita con el paciente es muy importante y le dedicamos todo el tiempo necesario. Después de recabar todos los datos y antecedentes de salud, se realiza una exploración de la zona periocular y yo personalmente le pregunto qué es lo que no le gusta. Si lo que disgusta al paciente tiene una opción quirúrgica y no hay ninguna contraindicación, pasamos a dibujar y explicar cómo es la intervención para que pueda entender el cómo y el porqué. Se informa del postoperatorio (tiempo de inactividad, curas, cuidados, etc.), se le muestran fotografías de pre y post de esta intervención y se le entrega una documentación que contiene una petición de analítica, un consentimiento informado (para que pueda leerlo con calma) y, por supuesto, un presupuesto cerrado. Esta visita es gratuita.

¿Por qué motivo es importante conocer las expectativas de los pacientes con la operación antes de realizarla?

Porque es fundamental para que el resultado sea satisfactorio. En ocasiones, el paciente quiere tener los ojos más grandes o que le quitemos las patas de gallo por ejemplo. En estos casos, la intervención será un fracaso porque las expectativas del paciente no se corresponden con la cirugía de blefaroplastia.

¿En alguna ocasión se ha tenido que negar a operar a alguien?

Si, en bastantes ocasiones. El principal motivo de negar la intervención es porque no la creo necesaria, al menos en el momento que veo al paciente. También por patologías asociadas que pueden complicar la intervención y, lógicamente, cuando las expectativas del paciente no se corresponden con la realidad.

¿Puede ser necesaria una revisión oftalmológica antes de una blefaroplastia?

Nosotros solo solicitamos una valoración oftalmológica, previa a la cirugía, a los pacientes con antecedentes de patología ocular para valorar si existen posibles riesgos para su visión.

¿Qué tipo de anestesia se suele utilizar? 

En nuestro caso la opción habitual es:

• Blefaroplastia superior: anestesia local, en ocasiones, con algún hipnótico vía oral.
• Blefaroplastia inferior o superior e inferior al mismo tiempo: anestesia local y sedación por nuestra anestesista.

El motivo de una y otra es, simplemente, el tiempo de intervención y la zona quirúrgica. La blefaroplastia superior se realiza en unos 35 minutos y la anestesia local es muy efectiva. Cuando la intervención es más larga, la incomodidad del paciente va en aumento. Además, el párpado inferior es más sensible y molesto por lo que la sedación es muy útil tanto para el paciente como para nosotros. Cuando acabamos la intervención, el paciente no se acuerda de nada y eso es muy gratificante. Tenemos la suerte de contar con una gran anestesista.

¿Qué recomendaciones deberán seguir los pacientes tras la cirugía?

Pocas y sencillas, dormir con la mitad del cuerpo superior un poco elevada para reducir la inflamación, aplicar gasas humedecidas en una infusión de manzanilla fría (excelente antiséptico y antinflamatorio), utilizar gafas de sol en el exterior y tomar los antiinflamatorios que les hayamos prescrito si este es el caso.

No hacer deporte ni esfuerzos y llamarnos ante cualquier duda o molestia.

¿Cuándo podrán regresar al trabajo? 

La intervención de blefaroplastia no provoca prácticamente ninguna incapacidad laboral, nosotros aconsejamos unos tres días de inactividad laboral, más por un problema estético que por una incapacidad física. En los casos de trabajos muy físicos, una semana sin hacer esfuerzos. 

¿Y al gimnasio?

Aconsejamos un mes sin gimnasio tanto por los esfuerzos, como por el riesgo de traumatismo.

¿Cuántas visitas de revisión se realizan tras la blefaroplastia? 

La primera revisión se realiza a los tres días y la segunda a los 7 días, donde se retiran los puntos. Posteriormente, se realizan visitas de control al mes, a los tres meses, a los seis y al año. Este es el protocolo habitual. Por supuesto que, en caso de molestias o dudas, se realiza un control de inmediato.

¿Se suele combinar la blefaroplastia con otros procedimientos de rejuvenecimiento facial para conseguir mejores resultados?

Es importante no realizar ningún tipo de tratamiento complementario, como implantes de ácido hialurónico, hilos tensores, etc. hasta que la blefaroplastia no esté totalmente estabilizada, como mínimo, tres meses después. Es más habitual realizar la blefaroplastia como tratamiento complementario de otras cirugías como el lifting facial u otros.