Todo lo que necesitas saber sobre el aumento de labios
La forma de los labios influye mucho en la estética de la cara, por eso no es de extrañar que en las últimas décadas se haya incrementado de forma notable la demanda de los procedimientos de aumento de labios.
Aumentar el volumen de esta zona del cuerpo puede ayudar a conseguir mayor proporcionalidad y armonía en la cara e incluso a corregir alteraciones de carácter estético, como las desproporciones de tamaño entre ambios labios o las arrugas peribucales.
Aumento de labios: ¿hay que pasar por el quirófano?
Hoy en día el aumento de labios se suele hacer a través de rellenos permanentes o temporales, pero lo cierto es que en los casos en los que la desproporción entre un labio y otro es grande, o cuando ambos labios son muy finos, se puede recurrir directamente al quirófano.
La operación de aumento de labios consiste en trasladar los tejidos de un labio a otro. La cicatriz queda escondida dentro de la boca, por lo que no quedan muestras visibles de la operación. El resultado es un labio más ancho, sexi y proporcionado.
Rellenos de labios: qué tipos se usan
En la mayoría de los casos el aumento de labios se hace a través de rellenos. Para reducir las molestias, toda la intervención se hace con anestesia local, que se inyecta directamente en la zona. De este modo, el paciente no notará nada de dolor.
Injerto de grasa autóloga
En este proceso se extrae grasa del paciente que, después de ser procesada y purificada, se inyecta en los labios. Este procedimiento se suele llevar a cabo cuando se realiza un estiramiento facial que implica retirada de grasa debido al exceso de la misma. Se aprovecha parte de esa grasa eliminada para retocar los labios y aumentar su volumen.
Su inconveniente es que siempre hay un tanto por ciento de grasa autóloga que tiende a ser reabsorbida por el cuerpo, por lo que algunas zonas de los labios se pueden quedar con menos volumen que otras.
Rellenos a base de colágeno, ácido hialurónico...
En estos casos, a través de una aguja muy fina, se realizan pequeños pinchazos en el labio para ir metiendo el relleno. A día de hoy el material más utilizado para el relleno de labios es el ácido hialurónico de origen vegetal. Sus resultados se prolongan entre seis y doce meses.
Existen otros rellenos cuyo uso no está muy extendido por sus efectos secundarios. El colágeno bovino permite obtener resultados temporales, pero tiene un alto riesgo de generar reacciones alérgicas.
El artecol es un compuesto formado por bolas microscópicas de metacrilato y colágeno. Sus efectos pueden verse durante uno o dos años, según cada paciente, pero suele provocar fibrosis que hace que el resultado no sea todo lo natural que debiera. Lo mismo ocurre con el goretex, que, a pesar de ser un método definitivo, acaba generando problemas de consistencia e inexpresividad.
¿Se puede usar silicona como relleno?
La silicona era el material de relleno para labios que más se usaba hasta hace unos años. Los malos resultados que ha dado a largo plazo han hecho que hoy en día esté totalmente descartado.
En España el uso de silicona para el aumento de labios está totalmente prohibido por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, no solo por los resultados a largo plazo de esta sustancia, sino porque es casi imposible retirar este relleno de los labios en caso de problemas o de efectos secundarios, lo que acarrea graves consecuencias en los pacientes.
Cuidados tras el aumento de labios
Este tipo de tratamientos no requieren de ningún proceso posoperatorio, por lo que el paciente puede volver inmediatamente a su rutina diaria. Pero como es normal tendrá que tener algunas precauciones durante los primeros días.
Durante las horas posteriores al tratamiento se deberá evitar la exposición al sol, así como a fuentes de calor o a temperaturas excesivamente frías; tampoco se podrá tomar aspirinas.Solo aquellos medicamentos que el médico prescriba. Si el paciente está tomando algún tratamiento específico, deberá comunicárselo antes de iniciar el tratamiento.
En los días siguientes a la intervención es normal que la zona esté algo inflamada a causa de las inyecciones. Algunos profesionales afirman, además, que pueden aparecer nódulos. Para evitarlos podemos seguir estos consejos:
- Masajear la zona a medida que se realizan las infiltraciones
- Hidratar bien los labios, ya que la sequedad es contraproducente
- Tomar medicamentos que prevengan la hichazón
¿Es un procedimiento seguro?
Hoy en día el aumento de labios es un procedimiento totalmente seguro si el paciente se pone en manos de un experto y se utilizan productos homologados para su uso. En este sentido, es importante asegurarse de que el producto está autorizado para su uso por el Ministerio de Salud, Servicios Sociales e Igualdad y no ha sido adulterado o diluido para sacarle un mayor rendimiento.
A fin de evitar problemas, antes de la intervención el médico deberá asegurarse de que el paciente no padece alergias (especialmente al colágeno) y que no consume medicamentos anticoagulantes.
Perfil del paciente que opta por esta intervención
El aumento de labios es una intervención más demandada por las mujeres que por los hombres, aunque se puede realizar sin ningún tipo de problema dentro del género masculino.
La mayor parte de las mujeres que optan por un tratamiento de este tipo son aquellas que ya han pasado de los 40 años. Comienzan a notar que la zona de los labios pierde volumen y, como consecuencia, las arrugas del área peribucal se muestran más pronunciadas. La mayoría de ellas opta por aumentar el volumen de los labios con ácido hialurónico, ya que suelen utilizar también este material de relleno en las arrugas próximas a la boca. El resultado es un rostro más terso, joven y proporcionado.