5 tratamientos estéticos con anestesia local
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Hoy en día es impensable realizar una cirugía sin anestesia, ¿verdad? El problema es que mucha gente tiene miedo a operarse por la anestesia general y sus posibles efectos secundarios. Por suerte, en la actualidad existen varios tratamientos bajo anestesia local, mínimamente invasivos y con unos resultados muy buenos.
Muchas de las operaciones de cirugía estética requieren anestesia general ya que permite que el paciente esté completamente dormido y elimina por completo las sensaciones y dolores. La anestesia general se realiza mediante la inyección de drogas, la inhalación de vapores anestésicos o ambos métodos juntos.
La anestesia local, por otro lado, solo duerme una parte específica del cuerpo al bloquear temporalmente la conducción nerviosa. Existen dos métodos: la anestesia local por infiltración (inyección intradérmica o subcutánea) y la anestesia local tópica, que permite anestesiar la parte seleccionada directamente sobre la piel mediante un gel líquido o spray.
Los beneficios de la anestesia local son muchos:
- Es menos agresiva y menos estresante para el cuerpo.
- La recuperación después de la anestesia local es más rápida y el paciente puede reanudar la actividad normal en menos tiempo.
- La hospitalización no es necesaria, por lo que se reducen los costes de la clínica y de las consultas con el anestesista, rebajando así el precio total de la cirugía.
Tratamientos que se pueden realizar bajo anestesia local
Permiten reafirmar la piel del rostro y también del resto del cuerpo. Se pueden utilizar en el óvalo del rostro, en los pliegues nasolabiales, en los pómulos, en las cejas y en la frente, y también en el cuello y el escote. Para el cuerpo, los usos están destinados a la parte interna de brazos y muslos, glúteos, estómago y rodillas. Los hilos tensores se deslizan debajo de la piel y se estiran para permitir que soporten el peso de la piel. El procedimiento es rápido y dura de 30 a 45 minutos según la zona. Se realiza con anestesia local. Este nuevo lifting facial no quirúrgico es eficaz y rápido, además los resultados ya son visibles al salir de la clínica y duran aproximadamente 2 años.
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La blefaroplastia es una intervención muy solicitada, consiste en rejuvenecer los ojos, uno de los elementos que sobre todo revelan nuestra edad. Hay dos tipos de blefaroplastia: blefaroplastia superior e inferior. Esta cirugía es útil para las personas que deseen: eliminar el exceso de piel alrededor de los ojos o los pequeños depósitos de grasa en esta zona; hacer que la apariencia sea más atractiva; eliminar la hinchazón debajo de los ojos. Esta cirugía de párpados se realiza bajo anestesia local y sedación. Su duración es variable y puede durar de 1 a 3 horas según el paciente y sus necesidades. La operación consiste en una incisión del párpado, la eliminación del exceso de piel y la sutura del área afectada.
Mucha gente teme a la liposucción debido a la ansiedad o miedo que les provoca pensar en la anestesia general. Es cierto que generalmente se requiere anestesia general para realizar esta cirugía de reducción de grasa corporal, pero también es cierto que en algunos casos es posible realizarla bajo anestesia local con cánulas muy finas, especialmente en los casos de liposucción tumescente y liposucción láser. Este tratamiento no es adecuado para personas que quieran adelgazar, sino para personas que deseen eliminar los depósitos de grasa que son difíciles o incluso imposibles de eliminar con una dieta convencional. De hecho, la liposucción permite tratar determinadas zonas concretas del cuerpo, como la barriga, la grasa de la cara interior de las rodillas, los muslos o incluso la papada. Especialmente en los casos en los que no es necesario intervenir en grandes áreas, se puede evitar la anestesia general. Además, con la liposucción tumescente y la liposucción láser también es posible reducir los tiempos de hospitalización y recuperación, otra ventaja significativa.
La otoplastia es una cirugía que se realiza para corregir las orejas que sobresalen o sobresalen. La operación implica hacer una incisión detrás de la oreja para remodelar el cartílago, pero existen otras técnicas menos invasivas que se realizan bajo anestesia local, como los implantes Earfold. Estos pequeños dispositivos protésicos en forma de U permiten acercar las orejas al cráneo y el cirujano los coloca en unos 20 minutos. Otra posible solución para las orejas protuberantes es la colocación de los hilos tensores detrás de las orejas, este procedimiento se realiza de la misma forma bajo anestesia local y solo necesita mini suturas.
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Las inyecciones de ácido hialurónico tienen una gran demanda en la actualidad. Se utilizan para tratar muchas imperfecciones, especialmente arrugas, pérdida de volumen e hidratación y son válidas tanto para el rostro como para el cuerpo. Sus ventajas son numerosas: rápida, no invasiva, de buenos resultados e indolora. De hecho, estas inyecciones se pueden realizar con anestesia tópica o incluso directamente sin anestesia. Muy a menudo, el vial que se usa para la inyección contiene anestésico en su interior, por lo que todo se hace con una sola punción. Sin embargo, las opciones son muy variadas: anestesia local con crema anestésica (para aplicar antes del tratamiento), anestesia tópica fría, ácido hialurónico que contiene anestésico local, anestesia periférica o incluso anestesia troncular (anestesia de toda la cara, menos utilizada porque es más restrictiva).
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