¿Conoces todos los beneficios del ácido hialurónico?
El ácido hialurónico es una sustancia que se encuentra de manera natural en nuestro organismo, en numerosos tejidos y órganos de nuestro cuerpo (cartílagos, epidermis), y que tiene la capacidad de atraer y retener el agua. Esto hace que los tejidos se mantengan hidratados y en buenas condiciones, haciendo que la piel luzca más tersa y radiante.
El ácido hialurónico tiene otros beneficios como la regeneración de la epidermis, de los tejidos conectivos y de los tejidos articulares. Además, participa en la formación estructural de los cartílagos, contribuyendo en su recuperación.
Sin embargo, a medida que cumplimos años, la presencia del ácido hialurónico en nuestro organismo va disminuyendo, y con ello la piel pierde hidratación y elasticidad. Y, de esta manera, aparecen las arrugas.
El envejecimiento es una realidad que no se puede evitar, pero sí podemos frenarla un poco. ¿Cómo lo conseguimos?
En primer lugar, adopta un estilo de vida saludable, que es fundamental para mantenernos más sanos y con menos limitaciones funcionales. Trata de llevar una alimentación saludable y huye del sedentarismo, manteniéndote activo diariamente. Por otro lado, las cremas que contienen ácido hialurónico también ayudan al rejuvenecimiento facial, y aportan luminosidad al rostro. Cuando la crema penetra en la piel, se mezcla con el ácido hialurónico natural (el que ya tenemos en el organismo), lo que deriva en una mayor producción de esta sustancia, además de favorecer la formación de colágeno.
Los tratamientos de medicina estética también sirven de gran ayuda para la ralentización del envejecimiento facial. En las clínicas de medicina estética, los tratamientos deben personalizarse dependiendo del paciente. El diagnóstico se realiza en la primera consulta, donde el especialista estudia cada caso para determinar cuál es el tratamiento indicado, teniendo en cuenta las características y necesidades faciales del paciente.
Ácido hialurónico en los tratamientos de medicina estética
El ácido hialurónico es uno de los rellenos más seguros para recuperar densidad y generar volúmenes en el rostro con el objetivo de combatir el envejecimiento, además de rellenar surcos y arrugas propias de la gesticulación o la edad. El ácido hialurónico aplicado a través de los tratamientos de medicina estética está enfocado a rellenar pliegues o crear volúmenes perdidos con el paso del tiempo.
Además de hidratar la piel y rellenar los pliegues, el ácido hialurónico sirve para los siguientes tratamientos:
- Rinomodelación: mediante la infiltración de un vial de ácido hialurónico se consigue suavizar un puente curvado o solucionar una nariz con la punta caída, en una sola sesión. En una primera sesión, el médico infiltra el producto en los puntos de la nariz que sea necesario remodelar para armonizar los rasgos faciales. En la segunda sesión se evalúan los resultados y se realiza un retoque en caso de que fuera necesario.
- Tratamiento para las ojeras: las ojeras pueden aparecer por la edad, los desequilibrios hormonales, el tabaco o por herencia genética. El ácido hialurónico, en este caso, tiene como objetivo nivelar el tejido entre los paquetes grasos que rodean el ojo y el volumen que sobresale de las mejillas. El tratamiento está indicado para aquellos pacientes que quieran rejuvenecer su mirada, y acabar con las bolsas y las ojeras.
- Aumento de labios: en este caso, el ácido hialurónico, además de aumentar el grosor de los labios, favorece la retención de agua y consigue una perfecta hidratación de la zona.
- Aumento de pómulos: este tratamiento está especialmente indicado para aquellos pacientes que presenten pómulos hundidos y que quieran recuperar la redondez y tersura de la juventud, alegrando su expresión facial.
- Rejuvenecimiento global facial: en clínicas Dorsia, este tratamiento se llama Contour Lift. El ácido hialurónico es uno de los rellenos más seguros para recuperar densidad y generar volúmenes faciales con el objetivo de combatir el envejecimiento y rellenar surcos y arrugas propias de la edad o la gesticulación. La eficacia del ácido hialurónico se debe a su gran capacidad para retener agua en la zona en la que es aplicado, mejorando así la calidad de la piel, rehidratando la zona y haciendo que luzca más tersa y joven.
En los tratamientos de medicina estética con ácido hialurónico, los resultados son inmediatos, pero se notarán mejor pasadas 3 o 4 semanas. El resultado tiene que ser natural y proporcionar una visión armónica del rostro.