¿Es posible una elevación de pecho con mínimas cicatrices y además que sea duradero en el tiempo?
El doctor José María Jiménez ha desarrollado una técnica de mastopexia que permite elevar el pecho femenino con mínimas cicatrices, mejorando tanto el resultado final de los senos como el post-operatorio.
Qué es y causas de la ptosis mamaria
La ptosis mamaria es el "descolgamiento" del tejido dermoglandular de la mama de la mujer, debido a que el pecho femenino no se sustenta a través de un músculo, sino solamente mediante la propia piel, la grasa y los ligamentos. En la caída de la mama Influyen numerosos factores, como la calidad de los tejidos, pérdidas importantes de peso, embarazo, lactancia, menopausia, tamaño del pecho, etc., pero fundamentalmente tiene que ver con que con el tiempo todos los tejidos que contribuyen a sostener el pecho van cediendo.
La ptosis mamaria no es una enfermedad, sino un problema estético. Con todo, puede ser un factor importante de desestabilización personal y la cirugía estética cuenta hoy día con intervenciones capaces de solucionarla.
Cómo se soluciona la ptosis mamaria
La única forma de solucionar la ptosis mamaria es mediante la intervención llamada mastopexia, pero existen diferentes maneras de realizar una mastopexia, que dependen del tipo y grado de caída del pecho.
Por ejemplo, en el caso de una ptosis mamaria leve (llamada de grado 1), en que el pezón y la areola se sitúan muy por encima de la línea del surco inframamario, se acostumbra a intervenir con una mastopexia periareolar. La mastopexia periareolar consiste en retirar el exceso de piel alrededor de la areola y en muchas ocasiones se acostumbra a hacer un aumento de pecho con prótesis.
Para las ptosis de grado 2 o 3 es necesario una intervención más invasiva, llamada mastopexia con cicatriz vertical o mastopexia con cicatriz en T invertida, ya que la cicatriz resultante tiene la forma de esa letra, partiendo del pezón.
Cómo es la intervención y qué cicatrices deja
La cirugía de mastopexia o levantamiento de senos persigue la eliminación quirúrgica del exceso de piel y la remodelación del tejido mamario. En ocasiones el tejido mamario es sustituido por prótesis, lo que contribuye a la elevación y proyección del pecho. A veces el cirujano decide intervenir en el pezón y reposicionar tanto el pezón como la areola para crear una apariencia más prominente y hacia adelante.
Es importante señalar que una mastopexia no es lo mismo que un aumento de pecho, ya que el aumento de senos es una intervención quirúrgica pensada para aumentar el volumen del pecho mientras que el levantamiento de senos está diseñado para levantar y restaurar el pecho tensando los ligamentos que lo sujetan.
La mastopexia es una intervención más compleja que el aumento de pecho mediante prótesis, ya que acostumbra a requerir anestesia general y su duración puede ser de tres o más horas.
En cuanto a las cicatrices, las incisiones se pueden hacer de tres formas diferentes:
- A la mitad del borde de la areola (levantamiento de media luna),
- Recorriendo la areola (levantamiento periareolar) incluyendo una incisión vertical
- Una combinación de los anteriores.
Por eso, en general la mastopexia supone habitualmente numerosas cicatrices en el pecho de la mujer, como alrededor de la areola, vertical y por el surco submamario. Esto lleva a muchas mujeres a sopesar detenidamente el hecho de someterse a este tipo de cirugías, ya que las cicatrices, aunque con el tiempo mejoren, son de carácter permanente.
Qué inconvenientes tiene la cirugía de elevación de pecho
Además de las cicatrices, otro problema que presentan este tipo de cirugías es que las técnicas tradicionales están basadas en elevar la mama resecando piel. Como sabemos, la piel es elástica y con el tiempo acaba cediendo, así que en muchos casos estas pacientes terminan siendo operadas de nuevo para realizar otra mastopexia.
A pesar de estos inconvenientes, una mastopexia realizada por un cirujano con experiencia la mayoría de las veces da como resultado un aspecto excelente
Cómo es la técnica revolucionaria para la elevación de pecho que minimiza las cicatrices
La mastopexia que realiza el doctor José María Jiménez consiste en realizar una sujeción interna del tejido glandular a la fascia del músculo pectoral. De esta manera, el resultado simula la función que realizan unos ligamentos denominados de Cooper, que sujetan la glándula mamaria al músculo pectoral, que son los que, con el tiempo, van cediendo.
De esta manera, es posible reducir las cicatrices externas, ya que la elevación que realiza el doctor José María Jiménez no se basa en la resección de piel, sino en anclar internamente la glándula mamaria. Así, la incisión cutánea es más pequeña (frecuentemente tan solo alrededor de la areola).
Además, esta intervención también permite que el resultado de la elevación mamaria sea más duradero en el tiempo en comparación con las técnicas clásicas de mastopexia, incluso cuando la elevación mamaria se acompaña de la colocación de una prótesis mamaria de cierto volumen.
También se reducen las complicaciones, al ser una cirugía menos invasiva y de menor tiempo quirúrgico. La recuperación postoperatoria también es más rápida que la de la mastopexia clásica.
Esta técnica ha permitido que muchas mujeres que no tenían claro si les compensaba tener unas cicatrices permanentes en el pecho, hayan podido cumplir su sueño, con unas incisiones mínimas y un resultado duradero.
El cirujano plástico José María Jiménez
El doctor José María Jiménez es un reputado cirujano plástico con consulta en Granada y Murcia que dispone de una extensa experiencia y formación. El doctor José María Jiménez ha ayudado a varios miles de pacientes como especialista en aumento mamario con prótesis o con infiltración grasa, elevación y reducción mamaria, ginecomastia masculina (liposucción y/o resección mamaria), lipoescultura, abdominoplastia, y otras intervenciones que ayudan a mejorar la calidad de vida de sus pacientes.
La primera consulta con el doctor José María Jiménez, con sedes en Granada y Murcia, es gratuita, y según el doctor “cada paciente es único, especial y hay que tratarlo de manera personalizada.” Por eso, es “primordial atender con cordialidad al paciente, escucharlo y que nos cuente lo que espera de su tratamiento o cirugía plástica. En todos los casos su salud será siempre lo primero “.