La causa principal de la flacidez o caída de la mama es la relajación del tejido cutáneo y de la glándula exocrina (todas las glándulas de la mama).
Podemos clasificar la flacidez de las mamas en tres categorías:
Existen tres causas principales de la caída de pecho:
Los embarazos, la lactancia, el paso de los años e incluso los cambios importantes de peso pueden tener un impacto visible en el aspecto del pecho, haciéndolo parecer vacío y caído. Cuando esto sucede, normalmente el polo superior del pecho se ve más vacío que el polo inferior, e incluso los pezones pueden aparecer más bajos respecto a su posición original.
Desgraciadamente, no existe mucho que se pueda hacer desde el punto de vista preventivo, ya que todos los factores que determinan la caída del pecho (o más concretamente, la ptosis mamaria) son completamente naturales y normales dentro del ciclo vital de una mujer, por lo que es muy común sufrir este problema en un momento dado.
Lo único que parece tener un efecto beneficioso y preventivo ante la caída del pecho es el uso de sostén. De hecho, en muchos casos no llevar sostén promueve la caída de los senos. En cuanto al deporte, es preciso desmentir el mito de que ejercitar los músculos pectorales puede ayudar a que los pechos se mantengan más firmes con el paso del tiempo.
Mastopexia
Esta cirugía consiste en realizar un levantamiento de senos remodelando la piel y eliminando el exceso de ésta, dando así una mejor forma a la mama y reposicionando los pezones. Existen tres técnicas tradicionales de levantamiento de pecho cuyos nombres reflejan la forma de la incisión: técnica de bloque redondo, cicatriz en T invertida y cicatriz vertical. La elección de la técnica dependerá de la gravedad del problema (ptosis). La operación de levantamiento de pecho se realiza bajo anestesia general y la paciente puede pasar la noche en observación. El periodo de reposo postoperatorio tiene una duración de entre 5 y 7 días, tras los cuales la paciente puede volver a su vida normal siempre que no realice ningún esfuerzo físico.
El resultado es inmediato, pero la hinchazón postoperatoria puede tardar hasta un año en desaparecer por completo, por lo que el resultado final puede valorarse, en el mejor de los casos, al cabo de unos meses. Al igual que los resultados, las cicatrices son permanentes, pero tras el tratamiento indicado por el cirujano, irán disimulándose con el tiempo, hasta hacerse cada vez menos evidentes. En algunos casos, la mastopexia puede combinarse con una mamoplastia de reducción para eliminar el exceso de volumen, especialmente en la parte superior del pecho, o en los casos en los que la paciente sienta que su pecho es demasiado grande, y le genere incomodidad y/o vergüenza.
Aumento de pecho con implantes mamarios
Se trata de la misma cirugía que la descrita en el apartado anterior, pero con la diferencia de que también incluye la inserción de implantes o prótesis mamarias, por lo que se habla de un aumento de pecho más completo. De hecho, con este procedimiento, los senos se levantan a través de las mismas incisiones que las realizadas en una mastopexia normal: (técnica de bloque redondo (periareolar), cicatriz en T invertida o cicatriz vertical). Una vez realizadas las incisiones se colocan las prótesis de silicona. El procedimiento, el postoperatorio y los resultados son, por tanto, similares a los de una mastopexia sin prótesis.
Esta cirugía puede ser una mejor opción para las pacientes que necesitan tanto levantar el busto como recuperar la plenitud y el volumen perdido. Está especialmente indicada en los casos en los que hay suficiente tejido mamario para acomodar el implante y darle proyección. Los implantes contienen silicona o solución salina y se pueden colocar por encima o por debajo del músculo. El tamaño del implante es a elección de la paciente con ayuda de su cirujano, que evaluará el tamaño de los senos para recomendar el más adecuado.
Lipofilling
Esta intervención consiste en transferir grasa autóloga al tejido mamario. Consiste en una liposucción que recoge la grasa de otra zona del cuerpo, posteriormente se purifica y finalmente se inyecta en los senos. Este procedimiento está especialmente indicado para aquellas pacientes que buscan resultados más modestos y naturales, ya que el aumento obtenido es el correspondiente a una talla y media aproximadamente.
Se debe tener en cuenta que el lipofilling por sí solo no levanta el pecho caído, ni mejora el aspecto "vacío" de la mama. Por lo tanto, a menudo es necesario combinar la transferencia de grasa con un levantamiento de pecho para obtener un resultado óptimo. Por este motivo, se trata de una técnica utilizada principalmente para las mujeres que tienen una buena elasticidad y tono de piel. Las incisiones y cicatrices son mínimas en comparación con las técnicas de mastopexia y aumento con implantes. Durante el periodo postoperatorio se puede experimentar algo de hinchazón y edemas en los senos, aunque el tiempo de recuperación es más corto, de modo que la mayoría de las pacientes pueden volver al trabajo en una semana. En cuanto al resultado del aumento de pecho, es menos predecible que con la cirugía con implantes, ya que no todo el tejido graso transferido se mantendrá intacto: al cabo de un año de la operación el cuerpo habrá absorbido una parte de la grasa transferida, y solo quedará entre un 50-70% de la grasa injertada. Además, en caso de pérdida de peso, el pecho también puede perder volumen, por lo que es importante realizar un trabajo de mantenimiento de la condición física después de la operación.