La cirugía de nariz o rinoplastia consiste en modificar el aspecto de la nariz, bien para afinar la punta, corregir el tabique desviado o limar la joroba, entre otros.
Realmente no hay nada que haya que limitar antes de una operación de rinoplastia, fundamentalmente, hay que preguntar siempre al paciente si está acatarrado o no, si está no puede operarse, y si está tomando algún tipo de medicación que pueda aumentar el sangrado postoperatorio, tipo aspirina, pero realmente no hay nada que tenga o que no tenga que hacer específicamente.
Durante la operación el paciente no debe que sentir nada, lógicamente. Tanto si se hace con anestesia general, la mayoría de los casos, como si se hace con anestesia local, sedación. Si el paciente sintiera algo nosotros no podríamos trabajar, directamente. La misión de nuestro anestesista que el paciente no sienta absolutamente nada.
La mayoría de las rinoplastias se hacen con anestesia general, pero determinadas rinoplastias que a veces afectan solo a la punta nasal o incluso rinoplastia completa, si el paciente lo solicita, se podrían realizar también con anestesia local y sedación con todas las garantías.
La duración estándar de una operación típica de rinoplastia viene estar entorno a una (1) hora, hora y cuarto (1:15), aproximadamente.
La vuelta al trabajo tras la cirugía es variable, pero generalmente en ocho (8) o diez (10) días los pacientes están en condiciones de reincorporarse a una vida normal sin que se note que su nariz ya haya sido operada.
La rinoplastia no duele, es una operación absolutamente indolora, es excepcional que los pacientes se quejen de dolor, incluso, en el post-operatorio inmediato.
Durante la recuperación fundamentalmente no hacer deportes, ni actividades que supongan una congestión de la cara, definitiva, aproximadamente durante tres (3) cuatro (4) semanas. Al principio, se desaconseja sonar la nariz durante tres (3) cuatro (4) días pero realmente se puede hacer prácticamente de todo en seguida.
Realmente una nota el cambio en su nariz en el momento en que se quita la escayola, sin embargo, la nariz está hinchada, tiene algo de edema, y el seguimiento de los pacientes dura en la consulta de seis (6) meses a un (1) año, pero prácticamente los cambios son ya visibles desde el momento en que se quita la escayola.
Es una duda que los pacientes tienen, es decir, “Doctor, bueno a mí me gustaría ver, saber cómo yo voy a quedar”. De entrada hay que hacer una planificación correcta de qué vamos a hacer cuando operamos la nariz, es decir, no basta con operar bien la nariz bien sino que hay que intentar dejar una nariz a gusto de nuestro paciente.
Yo siempre digo a los pacientes que para mí es una gran responsabilidad operar una nariz, cuando operas una nariz en una chica joven de dieciocho (18) a veinte (20) años, y yo les digo “esa nariz que yo te dejé, es la que vas a tener durante toda tu vida” es realmente una responsabilidad para mí.