Rinoplastia. El doctor Jorge Planas explica en qué consiste esta intervención, que soluciona los complejos que puede provocar una nariz que distorsiona la armonía de la cara
Una nariz grande es una de las alteraciones estéticas que puede crear más complejo. Hoy en Corpore Sano vamos a descifrar, a analizar, cómo se realiza una rinoplastia, una de las intervenciones estéticas más frecuentes y que ha aumentado en el último año un quince por ciento (15%) su demanda debido a la moda de los selfies.
No hay dos (2) narices iguales, si van por la calle y empiezan a mirar narices verán que es muy difícil que en un día entero consigan ver dos (2) narices iguales, incluso que sean parecidas. Por eso es muy importante el diálogo entre el cirujano y la paciente o el paciente para ver deseos, percepciones y también perspectivas de lo que va a ser el resultado final. El resultado final dependerá de esa primera consulta, porque es donde el cirujano estudia cómo va a realizar esa intervención atendiéndose a la piel, a los ángulos y a la anatomía de la nariz de cada caso.
Para entender cómo los cirujanos plásticos realizamos una rinoplastia, tenemos que conocer un poco la anatomía de la nariz. Todo mundo habrá visto una calavera en su vida, todo el mundo habrá visto una bandera pirata ¿Cómo es la nariz de una calavera? ¿Cómo es la nariz de una bandera pirata?...efectivamente es un agujero, es un agujero porque la nariz, la parte ósea de la nariz solo afecta a esta zona de aquí, todo esto que sería el resto de la nariz, es cartílago, es piel y es músculo.
Como vemos, la nariz consta de la parte ósea, como hemos dicho los huesos propios de la nariz que son estos de aquí, el tabique o cartílago septal, el septum que llega hasta el paladar para entendernos, y que es una lámina que cae perpendicular y vertical hacia el paladar y separa las dos (2) fosas nasales, y por lo tanto si está desviado por dentro es cuando dificulta la respiración. Y después estos cartílagos que son móviles, como vemos se pueden mover y que son los que dan forma a la nariz, se llaman los cartílagos alares, son dos (2) y son, o deben ser, simétricos.
Como hemos dicho antes, no hay dos (2) narices iguales, y por lo tanto lo que hay que hacer en cada nariz, la técnica a realizar es diferente. Vamos a ver ahora, por ejemplo, cuatro (4) tipos de narices muy diferentes.
En este primer caso, vemos una paciente de uno ochenta (1.80) de altura, con una cara larga y una nariz también bastante larga, con la punta ligeramente caída pero sobre todo un dorso muy prominente. En este caso hay que rebajar el dorso, estrechar un poco el puente, y subir un poquito el ángulo nasolabial.
En este segundo caso vemos que la punta todavía está más caída, y por lo tanto, en este caso aparte de rebajar el dorso y estrechar el puente, lo que hay que hacer es colocar un injerto de su propio cartílago, sacado del dorso, en la punta para poder dar suficiente fuerza a los cartílagos alares y así poder realmente modificar este ángulo nasolabial.
En este otro caso, el problema básico es la malformación de los cartílagos de la punta que hacen una deformidad en forma de columela colgante y por lo tanto necesita también un poste columelar, un injerto de cartílago de la propia paciente en esa zona para modificar esa anatomía de la punta nasal.
Y, este último caso, vemos que tenemos una nariz muy corta que tenemos que alargar. Y por lo tanto, lo que tenemos que realizar es un injerto en ele, un injerto expansivo de lo que es el dorso nasal, de lo que es la largura de la nariz para poder conseguir una nariz proporcionada la rostro.
A los tres (3) días se retiran los tapones de esponja de dentro de la nariz, unos tapones de esponja cortos, no son tan largos como los de antes y por lo tanto no molestan su extracción, y a la semana sacamos la férula de la nariz y siempre digo a mis pacientes que al día siguiente de sacar la férula de la nariz, ellos pueden tener ya una vida socio-laboral completamente normal porque no se va a notar nada que han sido intervenidos. Puede quedar un mínimo de amarillo, de residuo del hematoma antiguo, pero con un poco de maquillaje se puede hacer una vida completamente normal.
Una nariz bien operada tiene que ser una nariz que pase totalmente desapercibida en el rostro. Tiene que ser natural, equilibrada y proporcionada al resto de la anatomía de la cara, por lo tanto, dará paso a la hermosura de lo que es una sonrisa, y de lo que es una mirada.
Muchos de los pacientes que he operado de rinoplastia, cuando hablo con ellos en el post-operatorio tardío, te trasladan que realmente ha sido una intervención que les ha cambiado la vida, que les ha mejorado su autoestima, la confianza en sí mismos, y eso realmente es muy gratificante para un cirujano plástico.
Buena semana a todos, y la semana que viene hablaremos luz pulsada, y estará con nosotros la actriz Natasha Yarovenko.
