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¿Por qué hacer un aumento de senos?

El Dr. Carlos Cuesta Romero, médico especialista en cirugía plástica y recosntructiva, explica por qué hacerse un aumento de senos, y cómo afecta a nivel corporal este cambio.

Los senos constituyen en la mujer el símbolo de la femineidad por excelencia, añaden a la silueta una tercera dimensión. En el tórax, realzan su proyección hacia adelante en cualquier circunstancia, y a distancia equilibran y compensan las caderas a través de la cintura. Su aumento permite, en un único gesto, obtener una proporción del contorno general corporal, es decir, una mejora general de la silueta.

La mamoplastia de aumento agrupa un conjunto de técnicas quirúrgicas muy variadas según sea necesario, incluyendo la elevación, simetrización, corrección de senos tubulares y tuberosos. En definitiva se trata de una reconstrucción.

Todo este conjunto de técnicas quirúrgicas tienen como denominador común un objetivo fundamental: estilizar, equilibrar y rejuvenecer. Existen distintas opciones para aumentar la dimensión de los senos, en la mayoría de casos se utilizan elementos como son las prótesis mamarias. En ningún caso son permanentes como afirman algunos, sino que tiene una expectativa de vida, que dependerá no solo de la calidad de las prótesis sino también del estrés al que estén sometidas. También influye la estabilidad del peso corporal, esta última condición es también muy importante.

El período de recuperación o convalecencia puede ser variable dependiendo de las técnicas realizadas. En general, la mamoplastia de aumento con una vida más duradera, requiere de una convalecencia o una recuperación más paulatina.

Yo me llamo Paula, tengo treinta y ocho (38) años y me hice hace unos dos (2) años y medio más o menos, una operación de aumento de pecho, pues la verdad es que mi experiencia fue muy satisfactoria porque yo visité muchos cirujanos plásticos y cuando fui a él y le dije lo que yo necesitaba y lo que yo quería, pues él supo ofrecerme el tipo de solución que yo quería.

Me llamo Ana, tengo treinta y nueve (39) años y me he hecho una rinoplastia y un aumento de mamas hace una semana. El pecho sí que tenía complejo, quería hacerme el aumento, y como la recomendación que me habían hecho era tan buena pues me hice valiente y dije “De una todo” y no me arrepiento, lo volvería a hacer. Me dijo los pros, me dijo los contras y todo conforme me lo dijo ha sido como ha sucedido, todo. Me dijo que no iba a sentir dolor, y yo no me lo creía y a fecha de hoy estoy sorprendida porque no me he tomado ni un solo analgésico, y eso es para vivirlo, una cosa es contarlo y otra cosa vivirlo.
Pues yo, aparte de su profesionalidad, aparte de la profesionalidad que él tiene, la trayectoria, la experiencia, lo que valoro es que él es una persona que se preocupa por el paciente, no por él. O sea, él intenta que el paciente esté bien en cada momento, tenga lo que quiere y le cueste a él más o menos, le cueste una (1) hora como cinco (5). Él no va a intentar operar rápido para luego tener que operar a otro paciente, sino que él va a intentar si tiene que estar contigo cinco (5) horas estár como si fueras, vamos, lo más importante.