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Testimonio de balón intragástrico

21 sedes en A Coruña, Barcelona, Ciudad Real...

Vicky relata su testimonio con el balón intragástrico, lo feliz que está con el cambio que ha dado su cuerpo y su aspecto estético.

Soy Vicky Subirana. Yo trabajo en Nepal, en un proyecto de cooperación internacional y actualmente estamos haciendo la reforma educativa de Nepal, con un convenio que hemos firmado entre el Consejo de Ministros español, Ministerio Educación y también el Ministerio de Educación y de Cooperación Internacional de Nepal. Mi trabajo consiste en formar profesores aquí, que me los llevo ahí a Nepal y después entramos en las escuelas públicas. Trabajamos con los niños, con los padres, con las madres... formándolas a ellas también, y sobre todo con los maestros. Vivir allí es muy complicado porque no tengo un horario ni tengo una agenda fija. Yo empecé a ganar peso después de tener una mononucleosis, que llevaba 3 meses con ella y no me la detectaban.

Al final cuando llegue a España estaba muy mal. Me pusieron cortisona, entonces engorde 25 kg, y hasta que un día me encontraba tan mal tan mal que no sabía por dónde tirar, tenía la barriga muy hinchada, tenía mucha sensación de malestar, problemas digestivos y al final acabaron operándome y me quitaron la vesícula y es la que regulaba las grasas. Entonces, después de ahí me dijeron en Nepal que tenía que adelgazar, que si no pues iba a tener un problema cada vez más gordo.

Después de ponerme el balón intragástrico estoy encantada, porque no me lo puedo creer, la transformación que he hecho desde que me lo pusieron, pues yo creo que adelgace unos 12 kilos. El balón me ha ayudado sobre todo a modificar los hábitos que tenía, porque yo solía comer una vez al día, me hinchaba y a lo mejor estaba hasta que ya no no podía tirar de mi cuerpo y comía lo primero que pillaba en el camino y luego ya pues me quedaba hinchadisima y veía que esos hábitos pues que no me beneficiaban. Entonces ahora mi cuerpo ya me va pidiendo comer cada tres horitas una cantidad pequeña y me quedo ya satisfecha con eso, que antes solo me quedaba satisfecha si comía mucho de una vez, y esto psicológicamente creo que el balón me ha ayudado a ponerme un tope. Al no poder comer más que esto y es muy beneficioso sobre todo para tener este control.

Las personas que no lo hayan probado no saben lo que le estoy explicando, porque hasta que no te lo ponen no entiendes que tu cuerpo tiene un límite, que a veces te lo tiene que marcar, pues si tú no sabes marcar, te lo puede hacer un factor externo, ya que el balón es solo el principio de la ayuda para cambiar totalmente de hábitos de alimentación.