Hola!

Mi nombre es C, tengo 28 años y vengo a explicar cuál fue mi experiencia con el Dr Vernetta y su equipo. Escribo la reseña justo cuando ha hecho 3 meses desde que me puse en manos del Doctor.

Me sometí a una reducción de pecho, y a un necktite, como una especie de “minilipo” de la papada-cuello (no se como explicarlo).

Antes os pondré en antecedentes: Tenía el pecho muy caído. Realmente la areola casi ni se me veía, lo que me generaba no solo mucho complejo, sino dolores terribles en las mamas. Recuerdo un día que durmiendo sin sujetador (algo realmente extraño porque yo llevaba sujetadores deportivos 24/7), llegué a pisarme el pecho. Recuerdo que ese día le dije a mi pareja: “Ya está bien. He tenido suficiente. Tenemos que poner una fecha”.

Así lo hicimos, con mucho esfuerzo conseguimos ahorrar algo de dinero, y nos pusimos a buscar opciones.

Consideré que visitarme con tres doctores era suficiente (tampoco iba a volverme loca).

Escribí a la secretaria del Dr bastante apurada, y con algo de urgencia para visitarme con él, y así fue. Yo ya tenia el trabajo del Dr guardado desde hacía ¿años? Ni siquiera lo recuerdo, sólo se que en cuanto entré por la puerta, nada me decepcionó, y debo reconocer que superó las expectativas en absolutamente todo.

La amabilidad con la que me trató, el cuidado, como me lo explicó todo,… Me sentí realmente a gusto y tenia confianza absoluta. No podía sentirme, sinceramente, más segura ni en mejores manos.

Recuerdo que le dije que “quería que me quitara el pecho”. Es que no lo quería. Me suponía un problema para absolutamente todo: el trabajo, el deporte, mi dia a dia,… Él se rió y me dijo que “eso no podía hacerlo porque no me iba a gustar”.

Lo que él no sabía es que a partir de ahí, me gustaría todo.

En cuanto a las preguntas que le hice: tiempo de recuperación, dolor (tengo que decir que sobre el dolor me dijo que “no me dolería nada”, y… así fue), duración de la operación, cuestiones a tener en cuenta, …

La papada fue porque era algo que me generaba complejo. Era únicamente estético, y como ya estaba en la consulta pues… le pregunté. No contaba con hacérmela, sinceramente.

Preparatorio

Qué hice para prepararme para la intervención? Poca cosa: Me preparé con ejercicios para tener el mejor tono muscular posible en cuanto a la operación. Compré pijamas con botones Vestidos/túnicas también con botones Toallas pequeñas para lavarme (de verdad que pensé que sería una invalida durante semanas… y… para nada…).

Recuerdo los días de antes con muchas ganas. No estaba nerviosa (de verdad que no), lo que estaba era muy emocionada (en la foto que tengo de justo antes de entrar en quirófano… parezco una niña pequeña con juguete nuevo).

Aquella mañana llegué al hospital, con mucha ilusión, y allí estaba el Dr puntual como un reloj. Tan amable y atento como siempre. Me dibujo unas marcas, me hizo unas fotos, me contó como iría todo ahora, charlamos un poco y poco más. Me puso la canción que le pedí y cuando me desperté… ¡ya estaba!

Durante

Poco que decir. Pasé hambre porque tuve que estar en ayunas más horas de las que creía. Poco más. Dolor 0, ni en el cuello ni en el pecho. Molestias 0.

Me operé por la mañana de un viernes, y el sábado antes de comer ya me iba a casa. Me pasó a visitar la Dra Silva. Tan agradable y amable como el Dr.

Post operatorio

Como postoperatorio cuento a partir de cuando me fui del hospital hasta las 2 primeras semanas.

El pecho a penas me lo quería ver. Era consciente de que no vería nada que me gustara: Hinchazón Puntos Cicatrices super recientes Forma “extraña” Tacto “duro” La cara hinchada (cuello) Incomodidad por el vendaje del cuello
 Nada que no supiera de antemano. O que no hubiera visto en fotos, porque… al igual que tú, amigx… yo también busqué fotos y videos…

Lo único que se me ha hecho largo del postoperatorio ha sido el no poder hacer deporte.

He tenido movilidad en los brazos desde el primer día, no he sentido dolor (ni siquiera llegué a comprar los medicamentos que me había recetado salvo el antibiótico).

He podido hacer prácticamente vida normal: trabajar, pasear,…

No podía hacer deporte, cargar peso, conducir, o sacar a pasear al perro, pero por lo demás… A la semana me estaba lavando yo misma la cabeza… y salvo los 2 primeros días… me duché siempre sola. Es más… a la semana tenía una boda a la que pensaba que no podría ir… y… ¡fue la mejor boda de la historia! Además nadie se creía que estaba operada de la semana anterior!

La mentonera me molestó más que el sujetador postoperatorio, sinceramente. Pero supongo que porque te la ves y te la notas, pero nada más. Es como llevar calcetines: no molestan pero cuando te los quitas… ¡qué descanso!

De todas formas si tenía cualquier duda siempre podía ponerme en contacto con su equipo, lo que aún te deja más tranquila (si es que se puede estar más tranquila).

Después

Aunque debo reconocer que yo pensaba que hasta pasado 1-2 meses no me gustaría lo que iba a ver, no tardé tanto. La posición del cuerpo me cambió automáticamente y… ¡YA NO SENTÍA DOLOR! Pero es que… ¡nunca más! ¡Nunca más he vuelto a sentir dolor! ¡El pecho no tiene por que doler! Y… ¡es maravilloso!

En cuanto al cuello los resultados son muchísimo más rápidos. No se nota nada, no tengo cicatriz en ningún sitio, me he puesto collares cortos, cuellos altos,… Estoy encantada…

En cuanto al pecho… que decir… que ni en mis mejores sueños. Que de verdad que animo a quien quiera a hacerlo (y tenga la oportunidad), y a hacerlo con el Dr Vernetta. Que si tuviera que volver a hacerlo le escogería una y mil veces más. Que le agradezco en el alma el trato, la atención, el cuidado,…

Si tuviera que definir al doctor seria, sin duda, con las palabras: tranquilidad, seguridad, confianza, excelencia, cercanía, humanidad.

Doctor… Volvería a operarme conu usted una y mil veces más, porque ha sido de lo mejor que he hecho en la vida.

No puedo más que desearle una vida larga y plena: “larga” para poder seguir haciendo “plena” la de los demás, y plena… porque no merece otra.

Gracias, de verdad que gracias.

Espero haber podido ser de ayuda. Y siento haberme alargado tanto, sólo quería explicar aquello que me habría gustado leer a mí.

Un abrazo fuerte.