La importancia de un endocrino en la pérdida de peso
En SANUX decimos siempre a nuestros pacientes que para tratar correctamente la obesidad o el sobrepreso, es imprescindible contar con el apoyo y la supervisión de un endocrino para garantizar los resultados esperados.
Detrás de muchas de las alteraciones nutricionales está el funcionamiento disfuncional del metabolismo y de las hormonas. De ahí la necesidad de que un endocrino guíe el proceso de tratamiento de enfermedades como la obesidad.
El sistema endocrino y neuroendocrino es esencial ya que se encarga de que todos los órganos del cuerpo funcionen en perfecta armonía. Este sistema se encarga de regular las señales hormonales entre órganos para que estos tengan un funcionamiento normal durante todas las etapas de la vida, adaptándose a distintos estados y situaciones a los que se enfrenta nuestro cuerpo cada día. La alteración del sistema endocrino provoca muchos tipos de alteraciones en el cuerpo que puede traducirse en obesidad y sobrepeso.
Alteraciones en glándulas como el tiroides pueden causar distintos problemas como retrasos de crecimiento, pubertad precoz, síndrome de ovarios poliquísticos, amenorrea, hipertensión arterial, tumores neuroendocrinos, neoplasia endocrina múltiple y la identificación de factores de riesgos para la prevención endocrina entre otras muchas afecciones.
En el tratamiento de la obesidad, el endocrino se centra en la nutrición y el metabolismo. Tratando problemas como la obesidad, sobrepeso y las complicaciones que estas conllevan, metabolismo cálcico, síndrome metabólico, déficit de vitamina D y de otros micronutrientes, delgadez y desnutrición.
Otro campo de trabajo de nuestros expertos es la Diabetes. Somos especialistas en la diabetes de tipo 1, tipo 2, gestacional y patologías del páncreas. Ofrecemos tratamientos farmacológicos de insulina oral o inyectable. Y nos preocupamos por tu educación diabetológica, que es imprescindible para llevar una vida sana en estas circunstancias.
En definitiva, en Sanux Granada nos preocupamos por toda la regulación metabólica y hormonal de tu cuerpo para ofrecer unos servicios excelentes y de calidad.
En tratamientos tan complejos, invasivos y severos para la obesidad como son la cirugía metabólica, la cirugía bariátrica, la cirugía de la obesidad o el balón gástrico en otros, es imprescindible que el centro cuente con un endocrino. Este profesional de la medicina es el único experto en el tratamiento de la obesidad y el sobrepeso y es el único que puede garantizar que los resultados obtenidos de pérdida de peso se mantengan estables en el tiempo y no se vuelva a recuperar el peso perdido.
Hay que tener muy en cuenta que estos no son tratamientos con fines estéticos exclusivamente sino más bien que persiguen objetivos como mejorar nuestra calidad de vida, nuestra salud en general y, en muchos casos liberarnos de algunas enfermedades metabólicas como la diabetes tipo II, síndrome metabólico, hipertensión, etc.
Existen además afortunadamente soluciones farmacológicas muy novedosas y eficientes para el control del peso,
En los últimos tiempos se han desarrollado, gracias a la investigación farmacéutica, una serie de tratamientos que nos ayudan de una manera eficaz y segura a mantener el sobrepeso a raya gracias a su acción sobre el metabolismo y los mecanismos neurológicos del hambre. Estos tratamientos solo deben ser manejados por profesionales de la medicina como los endocrinólogos. De hecho, estas moléculas se han desarrollado a partir de los tratamientos que se han venido usando con pacientes diabéticos tipo II fundamentalmente. Ya que estos medicamentos tan eficaces y seguros, además de controlar y regular el metabolismo de los hidratos de carbono y las grasas, también nos ayudan a controlar el hambre. De manera que su uso, controlado por un médico endocrino, nos ayudará a la pérdida de peso en personas con un IMC por encima de 27.
Absolutamente todos los tratamientos para la obesidad y el sobrepeso ya sean farmacológicos, quirúrgicos, dietéticos, psicológicos o conductuales, etc pueden tener lo que se llama rebote. El rebote es la consecuencia de mala gestión de nuestros hábitos de vida.
Después de cada tratamiento para controlar nuestro peso y durante el mismo, debe hacerse hincapié en la modificación de los hábitos alimentarios, de prevención del sedentarismo y control de comportamientos concomitantes como la ansiedad, la depresión, los trastornos obsesivos compulsivos, etc.
Por estos motivos, el tratamiento de la obesidad debe de hacerse de una manera multidisciplinar. Abordando todos los aspectos que intervienen en este problema como los psicológicos, conductuales, nutricionales, endocrinos, médicos, etc.