Conoce los diferentes métodos para adelgazar con éxito
En Servicios Médicos Santa Cruz ofrecemos a nuestros pacientes diferentes métodos para adelgazar de forma efectiva según sus necesidades concretas. A continuación te detallamos las diferencias entre el balón intragástrico, la manga gástrica quirúrgica y el bypass gástrico.
Balón intragástrico de 6 meses y 12 meses
Se trata de un procedimiento ambulatorio que consiste en la implantación de un balón expandible de silicona en el interior del estómago. La intervención se realiza mediante endoscopia, que es una técnica poco invasiva de visión directa dentro de la cavidad gástrica del paciente.
La presencia del balón intragástrico (BIG) ayuda a que el paciente alcance más rápidamente la sensación de saciedad en las comidas, experimentando a su vez una mayor efectividad a la hora de perder esos kilos de más.
La intervención, bajo sedación profunda del paciente, se realiza en unos veinte minutos. El balón expandible se introduce por la boca mediante técnica endoscópica y se coloca en la cavidad del estómago. Posteriormente, se rellena con una solución salina teñida con azul de metileno.
Una vez transcurridos seis-doce meses, el balón intragástrico debe ser retirado nuevamente mediante endoscopia y con sedación anestésica.
Muchos estudios demuestran que el BIG es un procedimiento seguro y altamente efectivo para perder peso. En tres revisiones sistemáticas se observó una pérdida de peso media de 17.5 kg a los 6 meses, indicando que el 80% del peso perdido se producía durante los tres primeros meses y apreciando una gran mejora en las enfermedades asociadas.
Para quién está indicado
Este método se aconseja a pacientes con un Índice de Masa Corporal (IMC) mayor de 27, siendo excepcional su colocación en casos de obesidad mórbida (IMC>40), como puente a la cirugía para disminuir el riesgo quirúrgico. No obstante, se recomienda una valoración personal por el especialista, para que determine cuál es el tratamiento más apropiado.
Seguimiento
Esta es una técnica coadyuvante y, lo cual implica que, por sí misma, no garantiza la pérdida de peso en el tiempo. Por eso en SERVICIOS MÉDICOS SANTA CRUZ apostamos por un el seguimiento multidisciplinar, para que la técnica no pierda efectividad. Y es que nuestro objetivo no es sólo que el paciente pierda peso, sino reeducarlo para que no lo vuelva a ganar.
Nosotros apostamos por un seguimiento multidisciplinar de 1 año, empezando a contar desde la cita previa a la implantación. En esos 12 meses se distribuyen 15 citas de reeducación nutricional, 9 de refuerzo psicológico y 3 de seguimiento médico con un especialista en aparato digestivo. La programación de citas está ideada para concentrar el mayor apoyo durante los primeros 3 meses (fase 1) del seguimiento. En la segunda fase está centrada en ir otorgando mayor autonomía al paciente, reeducándolo y reconduciendo las conductas nocivas que le han llevado a la obesidad.
Precio: 6 meses - 3.600€ / 12 meses 4,000 €. Si algún paciente pregunta que por qué es tan barato, los motivos son múltiples:
- No vendemos un seguimiento que no va a cumplir ni es necesario. A menudo, desde antes de terminar el primer año de seguimiento, el paciente deja de acudir. El fabricante del producto prescribe un seguimiento de un año.
- Nuestras instalaciones son propias, lo cual abarata el coste.
Manga gástrica quirúrgica
La Gastrectomía Tubular en Manga o Manga Gástrica, es un procedimiento quirúrgico mediante el cual se realiza una resección del 80% del estómago, logrando un estrecho tubo gástrico con capacidad de aproximadamente 100 ml.
Así se consigue que el paciente ingiera una menor cantidad de alimentos, ya que:
- Se reduce la capacidad del estómago
- La intervención hace que el paciente produzca menor cantidad de ghrelina, la hormona que regula el apetito
Tras la reducción de estómago, el paciente suele experimentar una pérdida de peso media del 60-70%, principalmente durante los primeros diez meses.
Para quién está indicado
- Pacientes con un IMC comprendido entre 35 y 45.
- Pacientes a los que ha fallado la banda gástrica.
- No es una técnica adecuada para pacientes golosos o que no sigan con facilidad las indicaciones dietéticas.
Principales ventajas
- La forma y el funcionamiento natural del estómago no se ven alterados, con lo que se conserva su natural procedimiento de llenado y vaciado.
- Disminuye la segregación de ghrelina (la hormona del apetito), de modo que se aumenta la sensación de saciedad.
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Escaso riesgo quirúrgico, ya que no se efectúa ningún cruce o bypass en la zona intestinal.
Los pacientes no sufren efectos secundarios como malabsorción de vitaminas, dumping o diarreas.
Intervención y postoperatorio
- El proceso quirúrgico se realiza en unas dos horas y, tras un ingreso de un par de días en el hospital, la recuperación es rápida.
- Una semana después, el paciente puede volver a su actividad habitual, siempre que no conlleve demasiado esfuerzo físico. Pasado un mes de la intervención, sí se puede ya hacer deporte y realizar un esfuerzo físico moderado.
- A partir de ahí, es aconsejable adaptar la dieta con ayuda de expertos nutricionistas, debido a que se trata de un método de pérdida de peso restrictivo. Exceptuando los quince días previos a la intervención y el mes y medio posterior, los pacientes no tendrán que hacer uso de suplementos nutricionales.
Seguimiento
En SERVICIOS MÉDICOS SANTA CRUZ apostamos por un seguimiento multidisciplinar, para que la técnica no pierda efectividad y el paciente mantenga en el tiempo la pérdida de peso. Y es que nuestro objetivo no es sólo que el paciente pierda peso, sino reeducarlo para que no lo vuelva a ganar.
Nosotros apostamos por un seguimiento nutricional y psicológico de 1 año, empezando a contar desde la cita previa a la implantación. En esos 12 meses se distribuyen 15 citas de reeducación nutricional y 9 de refuerzo psicológico. Por otra parte, se incluyen 6 citas de seguimiento médico con un especialista en aparato digestivo protocolizadas a lo largo de los dos primeros años.
La programación de citas está ideada para concentrar el mayor apoyo durante los primeros 3 meses (fase 1) del seguimiento. En la segunda fase está centrada en ir otorgando mayor autonomía al paciente, reeducándolo y reconduciendo las conductas nocivas que le han llevado a la obesidad.
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Bypass gástrico
Esta intervención se considera actualmente el patrón de referencia de la cirugía de la obesidad, ya que es la técnica más utilizada y con la que se comparan otras técnicas. Se trata de una técnica con más de 30 años de existencia que se viene practicando por vía laparoscópica desde el año 1998.
El bypass gástrico es una técnica de reducción del estómago mediante la cual el cirujano genera una pequeña bolsa gástrica con el objetivo de reducir el volumen de las ingestas.
El nuevo reservorio o bolsa gástrica (20 a 50 cc), se une al yeyuno, mientras que el resto del estómago no se extrae, pero queda aislado al paso de alimentos, aunque sus secreciones se vacían de forma natural a través del píloro y hacia el duodeno.
El bypass gástrico es una intervención con excelentes resultados capaz de conseguir una reducción del exceso de peso en un 70% en tan solo cinco años. Obtiene resultados satisfactorios en el 95% de los pacientes, por lo que es la técnica preferida por la mayoría de los cirujanos.
Para quién está indicado
- Está indicado en pacientes con un IMC superior a 40 o 35 si tienen enfermedades asociadas de riesgo
- Pacientes de diabetes tipo II.
- Pacientes con reflujo gastroesofágico.
Principales ventajas
- Se puede comer de todo (comida sana y variada) sin experimentar procesos diarreicos ni flatulencias.
- El bypass gástrico suele dar más libertad al paciente que otras técnicas bariátricas, aunque para conseguir resultados óptimos, siempre se recomienda comer de forma saludable y la práctica moderada de ejercicio físico.
Se trata de una técnica más efectiva en la reducción del apetito, gracias a la bajada de la ghrelina.
- Se trata de un procedimiento seguro y efectivo para lograr una mayor pérdida de peso en comparación con otras técnicas bariátricas.
Intervención y postoperatorio
- El proceso quirúrgico suele rondar entre una hora y media y tres horas. Tras el quirófano, el paciente se reserva un par de horas en UCI antes de pasar a su habitación.
- El alta hospitalaria se produce a las 24-48 horas.
- Una semana después, el paciente puede volver a su actividad habitual, siempre que no conlleve demasiado esfuerzo físico. Pasado un mes de la intervención, sí se puede ya hacer deporte y realizar un esfuerzo físico moderado.
- Posteriormente se realiza una dieta por fases, que van desde los líquidos, túrmix y blandos, a una dieta normal pero siempre de menor cuantía. Se deben evitar las bebidas con gas, masticar despacio e ingerir los líquidos al principio y final de las comidas, en un plazo aproximado de 2 meses.
- En lo sucesivo, los pacientes realizan una alimentación variada y normal, aunque en cantidades menores.
- Se pauta en el primer mes, además del protector gástrico, un polivitamínico, un suplemento proteico y, durante 3 semanas, una inyección subcutánea diaria de heparina de bajo peso molecular para evitar riesgo de trombosis.
- Esta técnica requiere control analítico anual para controlar los niveles de vitaminas y minerales, con especial atención a la B12, calcio, hierro y vitamina D.
Seguimiento
En Servicios Médicos Santa Cruz apostamos por un seguimiento multidisciplinar, para que la técnica no pierda efectividad y el paciente mantenga en el tiempo la pérdida de peso. Y es que nuestro objetivo no es sólo que el paciente pierda peso, sino reeducarlo para que no lo vuelva a ganar.
Nosotros apostamos por un seguimiento nutricional y psicológico de 1 año, empezando a contar desde la cita previa a la implantación. En esos 12 meses se distribuyen 15 citas de reeducación nutricional y 9 de refuerzo psicológico. Por otra parte, se incluyen 6 citas de seguimiento médico con un especialista en aparato digestivo protocolizadas a lo largo de los dos primeros años.
La programación de citas está ideada para concentrar el mayor apoyo durante los primeros 3 meses (fase 1) del seguimiento. En la segunda fase está centrada en ir otorgando mayor autonomía al paciente, reeducándolo y reconduciendo las conductas nocivas que le han llevado a la obesidad.
